Los Padres de San Diego es líder de la División Oeste de la Liga Americana con registro de 9-2. A medio juego están Gigantes de San Francisco y Dodgers de Los Angeles. De esos nueve lauros, Robert Suárez se ha encargado de preservar cinco.
El inicio de zafra de Robert Suárez está siendo para enmarcar. Se le ve cómodo en la lomita y si fuese un bateador, su promedio estuviese en 1.000, porque va de 5-5.
Pero, como es pitcher su efectividad está inmaculada y su WHIP es de 0-20. En resumidas cuentas, no le han dado ni faul.
Suárez ha puesto el candado en las cinco oportunidades que San Diego lo ha necesitado sin despeinarse. Un episodio por labor es lo que ha requerido, no le han dado hit, solo ha concedido un boleto y ha pasado por la guillotina a siete rivales.
Bravos de Atlanta (2), Guardianes de Cleveland, Cachorros de Chicago y Atléticos de Oakland han sido sus víctimas hasta el momento.
Esa combinación de la poderosa recta que llega hasta en 100 mph con el cambio de velocidad entre 88 y 90 mph hace que los bateadores no sepan qué hacer. En cuatro de las cinco ocasiones ha terminado enfrentando solo a tres maderos.
Robert Suárez el año pasado tuvo cuatro rescates en sus primeros cinco cotejos, tres de ellos de manera seguida. En su cuarta aparición entró sin oportunidad de salvar y en la quinta volvió a poner el candado.
De hecho, su primera salida negativa tuvo que esperar hasta su aparición 29, cuando se apuntó su primera derrota al desperdiciar una oportunidad de salvado. Hasta ese momento su registro era de 4-0 con 17 rescates y un hold, efectividad de 0.61 y 28 ponches en 29.1 episodios.
Es así como gracias al gran trabajo de su cerrador, Padres de San Diego está viviendo un tremendo comienzo de temporada en el complicado Oeste.
| FRANCISCO ÁLVAREZ ALISTA SU RETORNO
El receptor venezolano Francisco Álvarez que sufrió una lesión Spring Training, por lo que no han estado disponibles para el mánager Carlos Mendoza ya esta por regresar al primer equipo. De acuerdo a un reporte de mlb.com, Álvarez y McNeil “tienen altas probabilidades” de sumarse a los metropolitanos a finales de abril, “quizás mucho antes”. Uno es un bateador de poder aún en proceso evolutivo, el otro es un hábil toletero zurdo con uno de los porcentajes de ponches más bajos entre sus colegas, cierto que ha venido en decrecimiento pero conserva parte de la mística que envuelve a cualquier campeón de bateo, logro que alcanzó en 2022 con 326. |
