|| Redacción El Periodiquito
Fieles religiosos rememoran que Jesucristo se reconoce como el salvador de la humanidad e hijo de Dios
El Miércoles Santo se realiza la procesión de El Nazareno, una de las tradiciones más representativas de la Semana Santa en Venezuela. La imagen de Jesús con la cruz a cuestas y vestido de morado realiza un recorrido simbólico al calvario, seguido por miles de feligreses, muchos de ellos vestidos del mismo color.
A pesar de ser una tradición popular en todas las iglesias, El Nazareno de San Pablo, de la Basílica de Santa Teresa en Caracas, y el de Achaguas, en el estado Apure, son las congregaciones más concurridas.
Se ha popularizado la tradición de adornar a la imagen con las orquídeas llamadas popularmente Flor de Mayo (Cattleya mossiae).
El Nazareno de San Pablo, por ejemplo, data del siglo XVII y estuvo en la capilla de San Pablo, hasta que fue demolida en el siglo XIX. La escultura entonces fue trasladada a la recién construida Basílica de Santa Teresa.
Es una de las devociones más populares del país y un símbolo de fe y esperanza durante la Semana Santa.
Los católicos le piden favores y luego “pagan” acompañando su peregrinación cada Miércoles Santo, en una procesión que dura entre tres y cuatro horas y en la que ofrecen velas y orquídeas.
En Maracay, se planifica la tradicional procesión del Nazareno, que partirá desde la catedral hasta la plaza Bolívar. En este punto, se realizará un encuentro del Nazareno con la procesión de la comunidad de Barrio El Carmen.
El padre Jesús Díaz, párroco de la catedral, resaltó que este año la Semana Santa tiene un carácter jubilar para la iglesia, lo que le confiere un significado especial.
En cada parroquia del país, el Nazareno ocupa un lugar especial. Su imagen, con la mirada serena y el rostro lleno de amor, congrega a los fieles que buscan consuelo, perdón y fortaleza.
