||Mariángel Oyarvez
Las zonas urbanas pavimentadas han reducido la capacidad natural del suelo para absorber agua, lo que aumenta el riesgo de desbordamientos de los afluentes
Jacobo Vidarte, rescatista y miembro del Instituto de Búsqueda y Salvamento, explicó que los ríos son más propensos a desbordarse en comparación con hace 50 años, debido al aumento de zonas urbanas pavimentadas que no permiten la absorción del agua.
Detalló que, aunque los ríos han perdido profundidad debido a otros factores como el material de deslizamiento, la combinación de mayor caudal (provocado por la urbanización) y menor profundidad hace que los ríos sean más propensos a desbordarse con una menor cantidad de lluvia.
De acuerdo con las fuentes consultadas, existen tres grandes cuencas que drenan sus aguas a través de un sistema de ríos, arroyos y otros cuerpos de agua en Aragua: la cuenca del Mar Caribe, la alta del río Orinoco y la endorreica del Lago de Valencia o Los Tacarigua.
Añadió que algunos de esos cuerpos de agua que recorren Aragua son los ríos San Miguel, Tucutunemo, Caramacate, Taguay y Pao. Por otro lado, se encuentran el río Aragua —señalado como el afluente más relevante del Lago de Valencia— y el Turmero.
Vidarte explicó que las comunidades deben tomar medidas preventivas y participar en la gestión de riesgos, especialmente frente a la temporada de lluvias.
“Una de las maneras de hacerlo es colocando sacos de arena en las entradas ante un tremendo palo de agua”, dijo Vidarte.