Los adultos con alergias al maní o cacahuate pueden ser tratados de forma segura mediante la terapia de exposición para aumentar su resistencia, muestran los resultados de un ensayo clínico reciente.
Más de dos tercios de los participantes (67%) adquirieron la capacidad de tolerar al menos cinco cacahuetes sin una reacción inmunitaria, informan los investigadores en la revista Allergy.
Este es el primer ensayo que evalúa la terapia de exposición en adultos, apuntaron los investigadores. Este tipo de terapia suele realizarse en niños, cuyo sistema inmunitario aún está evolucionando.
Bajo la terapia de exposición, los pacientes reciben dosis diarias de su alérgeno alimentario para aumentar su tolerancia.
“El miedo constante a las reacciones potencialmente mortales supone una enorme carga para las personas con alergia al cacahuate”, señaló el investigador sénior, Stephen Till, profesor de alergia del King´s College de Londres, en Reino Unido. “La única forma de gestionar una alergia al cacahuate es evitar y tratar estrictamente las reacciones alérgicas, incluso con adrenalina”.
Aunque se sabe que la inmunoterapia con cacahuate es efectiva en los niños, Till dijo en un comunicado de prensa que este ensayo proporciona evidencias preliminares de que los adultos también pueden desensibilizarse, lo que mejora su calidad de vida.
“La dosis promedio tolerada de cacahuetes aumentó 100 veces en el transcurso del ensayo”, dijo.
Uno de los participantes en el ensayo, un hombre de 28 años llamado Chris, había sufrido de alergias al maní desde que era un bebé.
“Estoy muy orgulloso de haber sido parte de este ensayo y muy feliz de decir que solía ser alérgico a los cacahuates, pero gracias a este ensayo, esto ya no es una preocupación”, dijo Chris en un comunicado de prensa. “Mi familia y yo siempre estuvimos ansiosos de que incluso un rastro de maní pudiera poner en peligro la vida”.
Calificó el juicio como “una experiencia interesante”, y señaló que siempre había “asociado el sabor y el olor de los cacahuetes con el miedo y la muerte”.
Chris dijo que comenzó la prueba ingiriendo una pequeña cantidad de harina de maní con yogur y al final pudo comer cuatro cacahuetes de una sola vez. “Ahora, tomo cuatro cacahuetes todos los días con mi desayuno para mantener mi inmunidad”, dijo.
“Antes, un pequeño error podía tener impactos potencialmente mortales, pero ahora no tengo miedo de colapsar y morir por comer comida para llevar”, concluyó Chris.
Con información de Infobae