El mandatario Nicolás Maduro expresó su agradecimiento al presidente estadounidense, Donald Trump, y a su enviado especial, Richard Grenell, por las gestiones que permitieron el retorno de la niña venezolana Maikelys a Venezuela.
En declaraciones públicas, Maduro reconoció el «acto de justicia profundamente humano» que significó el regreso de la menor.
«Diferencias ha habido y las habrá, pero es posible, con la bendición de Dios Padre, avanzar y resolver muchos asuntos», afirmó.
El contexto de estas declaraciones se enmarca en la reciente repatriación de Maikelys, una niña venezolana que se encontraba bajo custodia de las autoridades estadounidenses tras la deportación de sus padres.
Maduro también aprovechó la ocasión para manifestar su esperanza de que «muy pronto» se logre el rescate del padre de Maikelys y de los 253 venezolanos que se encuentran en El Salvador.
Aunque no se proporcionaron detalles adicionales sobre estos casos, el mandatario expresó su interés en que se resuelvan favorablemente.
