||Manuel laza Jr
La comunidad de la Unidad Educativa Privada Santísimo Salvador, ubicada en Cagua, se vistió de gala para conmemorar dos importantes aniversarios: los 35 años de la fundación del colegio en Venezuela y los 130 años de la fundación de las Agustinas Hijas del Santísimo Salvador. La celebración central fue una emotiva misa que reunió a estudiantes, docentes, personal administrativo y autoridades eclesiásticas.
La eucaristía fue presidida por su Excelencia Reverendísima Monseñor Enrique Parravano, Obispo de la Diócesis de Maracay, quien estuvo acompañado por los presbíteros Adalberto Freites y Juan Herrera. La presencia del obispo realzó la solemnidad del evento y destacó la importancia de la labor educativa y espiritual que realiza la institución.
Un momento significativo durante la jornada fue la despedida de los estudiantes de quinto año, quienes vivieron su última misa en el colegio, marcando un emotivo cierre de ciclo con el tradicional «último timbre».
Al finalizar la celebración, la hermana Gladys María Monteza, representante legal de la institución, expresó su profundo agradecimiento a Monseñor Parravano por su asistencia y bendición. Asimismo, la hermana Monteza enfatizó la relevancia de retomar la tradición de festejar anualmente el aniversario del colegio, resaltando el valor de la historia y el legado de las Agustinas Hijas del Santísimo Salvador.
Es importante destacar que la impecable organización de la misa estuvo a cargo del equipo pastoral del colegio, liderado por la hermana Johanna Silva, que con dedicación y esmero lograron una ceremonia memorable para toda la comunidad educativa.
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