Lavar la ropa es una de las tantas tareas del hogar que requieren entre muchas cosas de tiempo y cuidado para que quede impecable y las piezas duren más. Esta es una labor bastante exigente, pues no solo consiste en colocar la lavadora, poner jabón y agua, tender la ropa, planchar y volver a empezar.
A pesar de contar con electrodomésticos que nos ayudan mucho con esta labor, es posible que la ropa no quede como a nosotros nos gustaría, y en parte puede deberse a algunos errores que se cometen.
Partiendo de ello, te invitamos a que revises tus rutinas y leas estas líneas donde te comentamos cuáles son esos posibles errores que estés cometiendo sin percatarte.
¿Cómo lavar la ropa?
Para que esta tarea sea lo más sencillo posible es fundamental escoger un detergente apropiado según las piezas que vas a lavar y colocar el ciclo de lavado adecuado para evitar dañar las fibras de la ropa.
Además, es clave separar toda la ropa de acuerdo a los colores, tipos de tela, nivel de suciedad y si es ropa de vestir, de cama o de baño, por ejemplo.
Seleccionar y revisar las prendas
¿Quién no ha metido por error en la lavadora papeles importantes, billetes y otros objetos pequeños? Con seguridad la mayoría y esto es un error que debemos evitar.
Por tanto, antes de meter la ropa en la lavadora se recomienda dedicarse unos minutos a separar por colores y tipo de telas. Revisar cada pieza para sacar elementos que puedan dañar otras, e incluso la lavadora.
También debes cerrar los cierres, desabrochar los botones, y hasta voltear las prendas delicadas o meter en bolsas especiales, por ejemplo.
Cargas
Uno de los errores más comunes al momento de lavar es llenar el tambor de la lavadora a tope. Si estás realizando esto, debes saber que es imposible que las prendas se limpien y la suciedad desaparezca.
Además, aunque el electrodoméstico tenga gran capacidad, es recomendable dejar espacio libre a la hora de poner a funcionar para que se consigan mejores resultados, y evitar que ña máquina de dañe.
Detergente
Colocar el detergente es uno de los tantos errores que se cometen, porque en la mayoría de los casos se realiza de manera automática, sin fijarnos, deprisa y corriendo y se coloca la cantidad incorrecta, o mucho, o poco.
En cualquiera de los casos la ropa no queda bien lavada o provoca manchas blanquecinas, por ejemplo.
Lo correcto es seguir las instrucciones del fabricante y dosificar correctamente los productos, tanto el detergente como el suavizante o el desinfectante textil, si es que lo utilizas.
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Pretratar las manchas
Colocar la ropa sucia en la lavadora no hará que quede perfecta a la primera si tiene una mancha. No tratarlas antes de meter a la lavadora es uno de los errores que se suelen cometer.
Expertos recomiendan tratar las piezas antes de introducir al electrodoméstico con productos quitamanchas para sacar la suciedad más incrustada, y luego lava como de costumbre.
Dejar la ropa en la lavadora
Si acostumbras a dejar la ropa en la lavadora luego que termina su ciclo debes saber que estás cometiendo un error porque esto provoca que la ropa se arrugue mucho más y, al quedarse húmeda en el tambor de la lavadora, se pueden generar malos olores.
Es fundamental que en cuanto termine de funcionar la lavadora, se saque la ropa y se tienda. Este último paso es muy importante porque hacerlo de manera correcta ayuda a conservar la ropa y facilita el proceso del planchado.
Importante
Los expertos recomiendan separar las prendas en función del tipo de lavado que necesitan, atendiendo específicamente a la temperatura del agua.
Es decir, separar las prendas en grupos según se tenga que lavar en agua fría, a 30ºC o a 60ºC. Y dentro de estas categorías, dividir también por colores.
Esta es la manera de conseguir que la ropa quede perfecta y que sufra menos los efectos de los lavados.
Por otra parte, no debes descuidar el mantenimiento de la lavadora para que dure el mayor tiempo posible. Comienza por secar la goma de la puerta después de cada lavado para evitar que aparezca moho.
Se recomienda, además, que una vez al mes es conveniente limpiar el cajetín del detergente y los filtros de desagüe; por ejemplo.
Con información de Diario 2001
