El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se pronunció en torno a las “amenazas” de Estados Unidos a Venezuela con el despliegue de buques de guerra en aguas caribeñas.
En un mensaje en su cuenta de X, el mandatario advirtió que, si Venezuela llegase a sufrir un ataque, sería inevitable que Colombia sufra consecuencias.
«Si hay una agresión violenta contra Venezuela, lo que vemos en Siria e Irak será la realidad de toda la región grancolombiana. Asesinos de masas se adueñarán de territorios, movidos por la codicia, y los estados se debilitarán como instrumentos de paz social», opinó Petro en su cuenta de X.
Este escenario, dijo, pondría en riesgo directo la estabilidad de América Latina. Ante esto, Petro llamó a defender la soberanía de las naciones que integran la histórica Gran Colombia.
“En la patria grande de Bolívar no puede haber sino soberanía nacional”, aseguró, al subrayar que “ni en Panamá, ni en Ecuador ni en Colombia ni en Venezuela debe haber sujeciones serviles a extranjeros”.
Petro insistió en la necesidad de coordinar una política antinarcóticos común, pero basada en el respeto mutuo.
“La región debe coordinar en términos de igualdad su política antinarcotráfico con los extranjeros, pues se trata de un problema de la humanidad, pero en términos de igualdad, no de sumisión”, dijo.
Este lunes, en una rueda de prensa, el presidente Nicolás Maduro denunció que mil 200 misiles y ocho buques estadounidenses “apuntan” contra Venezuela en el Caribe.
“Venezuela atraviesa la amenaza más grande que ha percibido el continente americano en los últimos 100″, dijo Maduro.
La describió como una “amenaza extravagante, injustificable, inmoral y absolutamente criminal”, puntualizó el jefe de Estado desde Miraflores.
Apuntó que «ellos han querido avanzar hacia lo que llaman la máxima presión, que en este caso es militar, y ante la máxima presión militar nosotros hemos declarado la máxima preparación para la defensa de Venezuela».
También expuso que «las fuerzas imperialistas que pretenden satanizar» su liderazgo, para «afectar el proceso revolucionario que vive el país, no han podido ni podrán».
