||Rodolfo Gamarra
La comunidad teme que las crecidas habituales provoquen inundaciones, daños a viviendas y el colapso de infraestructuras clave
Los residentes de La Candelaria, en el municipio Mario Briceño Iragorry (MBI), han elevado su voz ante el peligro que representa el deterioro progresivo del muro de contención del río El Limón. Con la temporada de lluvias a punto de comenzar, la comunidad teme que las crecidas habituales provoquen inundaciones, daños a viviendas y el colapso de infraestructuras clave.
Carlos José Perón, bombero jubilado y vecino de la zona, explicó que el problema es recurrente y que las soluciones aplicadas hasta ahora son insuficientes.
«Todos los años enfrentamos lo mismo: el río arrastra los muros de arena, socava el terreno y las aguas se filtran por los desagües», señaló Perón. Según su testimonio, la acumulación de sedimentos ha elevado el lecho del río por encima del nivel de la calle, lo que incrementa el riesgo de que el agua se desborde hacia las viviendas. «Con solo dos horas de lluvia intensa, el caudal supera la barrera de contención», agregó.