|| Luis Chunga
***Es muy importante evitar reunirse dentro de un ambiente cerrado y mal ventilado, en especial si se comparta con personas enfermas
Los cambios bruscos de temperatura influyen en la aparición de enfermedades que afectan principalmente a niños menores de dos años. Entre los cuadros virales más comunes están resfriado común, gripe o influenza, la laringitis, faringitis, otitis, sinusitis y amigdalitis.
Según el médico pediatra Doctor Alejandro Crespo, en el período de lluvia aparecen más cuadros respiratorios, que atacan principalmente a niños y adultos mayores.
Explicó que también aumentan las infecciones respiratorias y alergias, porque la gente tiende a cerrar todas las ventanas para que no entre el frío de la calle, pero en esos espacios cerrados hay mayor posibilidad de contagiarse con alguna enfermedad viral respiratoria.
La situación se complica con los infantes que comparten en maternales, preescolares y en escuelas, pero los adultos también resultan afectados en lugares de trabajo.
Ante esta situación, el médico pediatra consideró que entre las claves para disminuir este tipo de enfermedades están ventilar bien los espacios, abrir ventanas y puertas en la medida de lo posible, tratar de no mantenerse en sitios herméticos o mal ventilados.
“Si vas estar en lugares cerrados es recomendable utilizar la mascarilla o tapabocas, sobre todo niños mayores de cuatro años”.
Asimismo, indicó que si una persona está enferma debe taparse la boca cuando vaya a toser, igualmente hay que lavarse las manos y evitar -en la medida de lo posible- tocarse la cara.
“Hay que alimentarse bien, comer frutas, verduras, vegetales, proteínas, carbohidratos, porque tienen vitaminas y minerales que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico”.
Es recomendable dormir 8, 10 o 12 horas al día, depende de la edad. “Los niños deben dormir durante la noche las horas que le corresponden, y si están en una edad de siesta, pues que duerman”.
FORTALECER LAS DEFENSAS
El especialista enfatizó que la mejor manera de fortalecer el sistema inmunológico es poner las vacunas que corresponden de acuerdo a la edad. En época de lluvias se sugiere inmunizar con la antigripal, que corresponde todos los años desde que los niños cumplen seis meses, la segunda a los siete meses, y a partir de allí anualmente, hasta los nueve años.
Después de esa edad se suministra a algunos pacientes en particular, como mujeres embarazadas, personal de salud, y aquellas personas que tengan un sistema inmunológico más comprometido, como por ejemplo los niños con problemas del corazón y asma.
Función beta
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