|| Luis Chunga
*** Pedir ayuda puede resultar todo un desafío para los representantes del género masculino, enmarcados en una sociedad que los define como “fuertes e independientes”
Luego de vivir un intenso “Mes rosa” el pasado octubre, con campañas en pro de la lucha contra el cáncer de mama, Venezuela y otros países de Latinoamérica se unen a “Noviembre azul”, un tiempo para promover la salud masculina.
El color de la campaña está relacionado con la percepción social de la masculinidad, sensaciones de poder, confianza y estabilidad. En este tiempo no sólo se busca que el hombre atienda su salud física, sino la emocional, por ello el mensaje va dirigido al bienestar general de los caballeros.
Cuando se habla de salud mental en los hombres, inmediatamente salen a relucir estigmas, barreras sociales, culturales y siempre la imagen varonil de fortaleza y autosuficiencia.
Expertos en psicología afirman que esto se debe a una serie de ideas o estigmas que la sociedad ha puesto sobre el género masculino a lo largo de la historia, en lo que predomina la creencia de que el hombre debe tener una actitud “fuerte” e “independiente”.
El tema los hace sentir incómodos y muy pocos son los que buscan ayuda profesional, en contraposición a las mujeres que son más conscientes porque inmediatamente recurren al médico, en caso de sentirse mal.
Atenas Quero, psicóloga clínico, conferencista y presentadora de TV, resaltó que el hombre tiene muchos prejuicios, por ejemplo, le cuesta pedir ayuda cuando está enfermo o en cualquier circunstancia de su vida, incluso al estar afectado por otras emociones, no le gusta demostrarlas por temor a ser considerado débil.
“Difícilmente acuden a una terapia, sea cual sea su sufrimiento”, ante lo que la especialista recomendó “pedir ayuda a un profesional de la salud mental las veces que sea necesario”.
Resaltó que no puede considerarse una debilidad asistir a terapia para hablar de aquello que los aflige.
“El hombre tiene que cambiar el camino del sufrimiento por donde transita, porque esas emociones nunca le van a funcionar en su vida”.
ABAJO LOS PREJUICIOS
La Sociedad Anticancerosa de Venezuela trabaja hace 75 años en pro del bienestar de pacientes oncológicos y en los avances de la investigación médica especializada en cáncer a nivel general.
El pasado 9 de noviembre, la junta directiva de la sociedad convocó a una rueda de prensa con el propósito de hacer visibles las actividades a desarrollar en el llamado “Mes azul”, con la campaña que se lleva a cabo en noviembre para concientizar sobre la salud masculina.
A lo largo de este mes, se promueven la prevención y detección temprana de enfermedades como el cáncer de próstata, testículo, pene, sumando también la salud mental masculina.
Una de los puntos conversados fue el de preservar y cuidar el estado de buena salud mental, en lo que es fundamental romper los estigmas y promover el diálogo sobre los problemas de salud mental que afectan a los hombres, así como brindar apoyo, junto a las herramientas adecuadas para marcar la diferencia en la vida de muchos caballeros.
Ante la ausencia de cifras oficiales, la Sociedad Anticancerosa de Venezuela lleva sus propios registros: 11 hombres por día mueren a causa del cáncer de próstata y cerca de 4.000 fallecieron por esta causa en 2023.
De aquí, la importancia de superar los prejuicios y apostar a la vida con asistencia preventiva, no solo de lo físico, sino de lo emocional.
UNA BOMBA DE TIEMPO
Para la psicóloga Stephanie Guillá, un hombre que reprima constantemente sus emociones negativas se vuelve una “bomba de tiempo”, que generará una consecuencia negativa mayor en su vida.
“Al hombre le cuesta mucho gestionar sus emociones por naturaleza, y entonces lo que hace es “engavetarlas” y cuando vienen a sentir, tienen “explosiones” importantes en sus vidas, no solo en temas de temperamento, sino en sucesos que llegan a marcarlos mucho anímicamente, y es ahí donde el hombre busca ayuda”, afirmó la psicóloga.
Añade que los caballeros tienden a pedir “auxilio” muy tarde, y que no es hasta que hay problemas graves a nivel emocional, físico o en sus relaciones sociales que empiezan a buscar asistencia.
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