|| David Marcano Duarte
Oportunidad para que la sociedad reflexione en torno a los avances y los retos pendientes para la inclusión
Cada 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, declarado en 1992 por la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), con el objetivo de promover los derechos y el bienestar de las personas con alguna condición física o motora.
Esta fecha también es una oportunidad para que la colectividad reflexione en torno a los avances y retos pendientes hacia una humanidad verdaderamente inclusiva y empática.
El lema de este año es “Fomentar el liderazgo de las personas con discapacidad para un futuro más inclusivo y sostenible”, el cual enfatiza la necesidad de que esta población no sólo sea integrada a la sociedad, sino que lidere transformaciones.
Sobre el tema, Valentina Trovat, licenciada en Administración Comercial y formada en Discapacidad Crítica, destacó que durante los 32 años de celebración de esta fecha siempre se ha tomado como un día emblemático en todas partes del mundo.
“Pone en la palestra pública el tema de los derechos y opciones, así como la equidad y la inclusión que debe prevalecer en las personas con discapacidad”, dijo.
La también docente de pregrado de la Facultad de Ciencias de la Salud y postgrado de la Universidad de Carabobo, mencionó que en los próximos años el índice de discapacidad tiene tendencia a crecer, en virtud de las edades de los grupos involucrados.
Según explicó, esto como consecuencia a los ritmos y estilos de vida y las secuelas dejadas por la pandemia del COVID-19.
“Es un aspecto importante que merece ser considerado para llamar a la reflexión respecto a la incorporación de manera orgánica, en todos los espacios de la vida pública de las personas con discapacidad”, sugirió.
En torno al respaldo legal por parte del Ejecutivo nacional para ese propósito, consideró que los avances logrados hasta ahora son importantes, tal como la incorporación de leyes en el proceso de clasificación, certificación y calificación de estas personas.
Igualmente, la implementación de campañas que exigen al patrono contratar a personas con discapacidad.
“Son aspectos que de alguna manera allanaron el camino y sobre todo permiten la sensibilización de entender que existen capacidades y potencialidades por encima de las limitaciones”, acotó.
En este sentido, señaló que si bien es cierto que existen discapacidades que pueden comprometer la salud de estas personas en el desarrollo de ciertas actividades, es importante que se cumpla el proceso de certificación para entender el caso.
MUCHO POR HACER
La docente universitaria indicó que, a pesar de todos los esfuerzos por visibilizar a esta población de la sociedad, aún existen estigmas y parámetros restrictivos respecto a las posibilidades infinitivas que tienen los seres humanos con discapacidad.
“Hay un concepto errado respecto a la anormalidad y muchas veces tipificamos incluso, por desconocimiento. De allí la importancia de esta fecha para poner en alto los derechos, pero también el reconocimiento de los deberes”, enfatizó.
Trovat mencionó la frase: “La Justicia sólo será posible en la medida que asumamos la responsabilidad”, la cual, en el caso de la discapacidad, es creyente que debe existir responsabilidad no sólo del sector privado en el caso de los trabajadores, sino en el área pública”.
“Tienen la responsabilidad de abrir el abanico respecto a garantizar el derecho de la salud y educación, así como la accesibilidad universal a través de la identificación de los espacios y accesos para personas de movilidad reducida”, agregó.
Sobre este aspecto, señaló que de acuerdo al artículo 21 de la Constitución Nacional, todas las personas son iguales ante la ley y no se podrá ratificar discriminación alguna. Lo que traduce que la discriminación por discapacidad es tomada como delito, al estar consagrado como un derecho fundamental en la Carta Magna.
“Este aspecto es ratificado en el artículo 81, donde dice que toda persona tiene derecho al ejercicio pleno de sus capacidades y a la integración familiar y comunitaria”, recalcó.
Sobre este aspecto, detalló que este 2024 se llevó a discusión en la plenaria de la Asamblea Nacional, la Ley Orgánica para la Inclusión e Igualdad y Desarrollo Integral de las Personas con Discapacidad, con el objeto de asegurar que a este sector se les reconozca la dignidad humana enfocada como un derecho para el disfrute efectivo y autónomo en su desarrollo integral.
BARRERAS
*.- Físicas:* Infraestructuras públicas y privadas que no cumplen con estándares de accesibilidad, limitando la movilidad y participación. *.- Sociales:* Estigmas y prejuicios que perpetúan la exclusión de sus derechos. *.- Educativas:* Métodos de enseñanza poco adaptados que dificultan el aprendizaje y la integración de niños y jóvenes con discapacidad. *.- Laborales:* Altas tasas de desempleo, debido a la discriminación y falta de políticas inclusivas. |
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