|| Rodolfo Gamarra
Desde Aragua, elevaron un mensaje de resistencia y protesta “ante las difíciles condiciones que enfrenta la educación en Venezuela”
La Asociación Civil de Educadores, Jubilados y Pensionados del estado de Aragua tomó las calles en el marco del 93 aniversario del Día del Maestro, que se conmemora cada 15 de enero en Venezuela. La jornada en la entidad se destacó por un enviar claro mensaje de resistencia y protesta “ante las difíciles condiciones” que enfrenta la educación en Venezuela.
Teodomiro Aguilar, presidente de la asociación, expresó su “profunda preocupación por la crisis del sistema educativo”, una situación que afecta no sólo a los representantes del gremio, “sino también a millones de estudiantes en el país”.
Enfatizó que desde su creación hace 93 años, la primera asociación de maestros tuvo como objetivo defender los derechos e intereses del gremio.
Recordó que el maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa fue reconocido por inculcar en sus discípulos la importancia de tener un espíritu crítico e independiente del contexto político y según Aguilar, la responsabilidad del educador va más allá de enseñar, “incluye influir en el desarrollo social y la transformación de Venezuela”.
Aguilar destacó que en cifras recientes, se estimó que 26.000 planteles en todo el país están en condiciones inadecuadas. “El 80% de los comedores escolares está cerrado, lo que agrava aún más la pobreza alimentaria entre los alumnos”.
Los docentes denunciaron el “cerco presupuestario impuesto por el gobierno”, el cual ha limitado los recursos disponibles para la formación docente. “Esta limitación generó un fuerte sentimiento de indignación dentro del gremio”, enfatizó el dirigente.
“Hoy es imposible dar clases”, afirmó Aguilar, al referirse a las carencias que presentan en sus propias instituciones. Además, subrayó que no pueden continuar bajo condiciones de miseria, “ni con regalías temporales”.
Expertos en educación opinan que la falta de inversión en este sector repercute de forma negativa en la calidad del aprendizaje de los estudiantes. Aguilar alertó sobre la escasez de docentes, con una ausencia estimada de 166.000 educadores, “a lo que se suma la fuga de talento hacia el exterior en búsqueda de mejores oportunidades, lo que deja al país en una situación crítica”.
A pesar de enfrentar un salario de 300 bolívares, Aguilar reafirmó la decisión de mantener la lucha por el futuro de la educación en Venezuela. “De rodillas nunca”, proclamaron los asistentes.