Atribuyen a la desorganización en la recolección
||Judith Castillo
La comunidad de Caña de Azúcar, parroquia del Municipio Mario Briceño Iragorry, se mantiene sometida a la contaminación ambiental generada por la acumulación de toda clase de desechos en sus espacios abiertos.
Pese a que los camiones recolectores pasan regularmente, pareciera que existe una descoordinación con las personas que allí habitan, con respecto a los horarios y días de colocarlas bolsas en la calle.
Esta situación se presenta a lo largo y ancho de la mencionada comunidad que propicia un ambiente de contaminación e insalubridad, afectando el ornato y convirtiéndose en una amenaza para la salud pública tanto de residentes como de quienes transitan por sus avenidas.
Transeúntes, al ser consultados sobre el particular destacaron que no hay espacios adecuados para colocar la basura antes que pase el camión recolector.
Tomando en consideración la gran cantidad de residentes, se forman montañas de bolsas y escombros en cualquier rincón a cielo abierto, incluso, al borde de canales y en medio de cruces de calles, generando imágenes nada favorables.
Hubo un momento en que se observó a los obreros de los camiones recolectores obligados a utilizar palas y hasta trozos de telas o sacos para poder recoger toda la basura esparcida en el suelo que había sido sacada de las bolsas que se lanzaban por los particulares en dicho montón improvisado.
En tal sentido, el llamado en primer lugar es a la comunidad en general para que se organice por sectores y, conjuntamente con el ente competente municipal, reorganizar en toda Caña de Azúcar para establecer espacios acondicionados para tal fin-
.
