|| José R. Carpio G.
**En negocios como pescaderías y heladerías se interrumpe la cada de frío de los productos**
En Maracay, propietarios y gerentes de negocios que dependen de productos congelados enfrentan una creciente preocupación debido a los frecuentes cortes de energía eléctrica en la zona.
Esta situación genera pérdidas significativas, tanto por el deterioro de los productos como por la disminución de las ventas, ya que muchos de estos alimentos requieren mantener una temperatura específica para su conservación.
Johamig González, encargado de una heladería en la ciudad, señaló que las ventas se detienen porque no pueden abrir los congeladores sin arriesgar la calidad del helado, lo que impide la salida de productos durante los apagones.
“En los días sin este servicio no podemos vender, ya que las cavas deben permanecer cerradas; aunque el producto se conserva en el refrigerador, las ventas se paralizan”.
Asimismo, las pescaderías que carecen de generadores eléctricos se ven obligadas a producir hielo para mantener la mercancía.
Carlos Olival, encargado de uno de estos establecimientos, describió los “malabares” que realizan para conservar los productos y evitar su deterioro.
“Debemos hacer o comprar hielo de manera constante para compensar la falta de energía eléctrica, colocándolo sobre los productos para mantener la temperatura adecuada. En ocasiones, la mercancía se pierde”.
Por su parte, Francis Vegas, responsable de una heladería, menciona que sólo dispone de un congelador y las continuas fluctuaciones han afectado gravemente su negocio, debido a la pérdida de productos.
Los propietarios de estos establecimientos coincidieron en solicitar a las autoridades que se establezca un horario fijo para el racionamiento de energía eléctrica, con el fin de mitigar el impacto en sus operaciones.