|| Luis Chunga
El obispo de la ciudad consideró que la celebración inspira a seguir “viviendo con humildad y confianza en el Señor”
En una emotiva peregrinación que inició en la catedral de Maracay, situada en la avenida Bolívar, y que tuvo como destino el santuario de la Madre María de San José, un grupo de fieles y representantes de la iglesia católica acompañaron la imagen de San José, reconocido como el patrono religioso de la ciudad.
La procesión, que se llevó a cabo en la mañana del miércoles 19 de marzo, fue liderada por monseñor Enrique José Parravano, obispo de la localidad, quien subrayó la relevancia de San José, conocido también como el padre de la Iglesia Universal.
Durante su discurso expresó: “Hemos venido a implorarle a Dios por la educación, la familia, por Venezuela entera y por todos los que sufren, por todos los necesitados, por todos aquellos que necesitan el cariño de alguien que los mire con aprecio, con respeto”.
Además, instó a que este tipo de celebraciones sirva de inspiración para que los corazones sigan el ejemplo de San José, a través del que se “promueve una vida de humildad y confianza en el Señor”.
Destacó que este hombre, esposo de la virgen María y padre adoptivo de Jesús, debe ser venerado como el guardián de las promesas divinas y un símbolo de disciplina y protección familiar, “a través de su obediencia y entrega silenciosa”.
Para concluir, afirmó que la vida de San José “nos enseña que la esperanza no depende de certezas humanas, sino de confiar plenamente en el amor y la fidelidad de Dios. No es una espera pasiva, sino una actitud valiente que nos impulsa a actuar con amor”.
