|| Rodolfo Gamarra
La nueva generación tiene que adecuarse a esta tecnología, la que no lo haga será inevitablemente desplazada
La Inteligencia Artificial (IA), ha creado un gran impacto en la sociedad actual. Son diversas las aplicaciones en la que esta nueva tecnología puede aportar a las áreas de salud e industria. Sin embargo, expertos aseguran que queda mucho camino por recorrer, para que pueda ser aprovechada de manera segura en Venezuela.
Ramón Rubio, presidente del Colegio de Médicos del estado Aragua, consideró que el tema de la IA en Venezuela es interesante y muy controvertido, aunque reconoció que en países desarrollados ya se utilizan modelos para cierto tipo de actuaciones en la medicina, sobre todo en neuro-cirugía y la micro-cirugía vascular.
Se espera que esta tendencia tecnológica aplicada a la medicina, continúe en evolución para mejorar los procesos clínicos existentes.
Un ejemplo es el uso del software diagnóstico basado en imágenes médicas como el sistema “IDx-DR”, aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), capaz de detectar con precisión las lesiones diabéticas en los ojos sin necesidad de intervención humana durante el proceso.
Otra aplicación interesante es el uso de IA en el análisis de resultados de laboratorio mediante sistemas como “Correlation One”, que pueden automatizar la identificación de enfermedades raras. Por otra parte, la Inteligencia Artificial también ha demostrado su utilidad en la optimización de recursos asistenciales de hospitales al analizar datos y predecir patrones, con el uso de herramientas como “CareSpark”.
Sin embargo, Rubio insistió en que no existe en la actualidad una legislatura en Venezuela, desde el punto de vista de la bioética y de la deontología médica, que regule ese campo de la IA, aun así, aseguró que existe un gran potencial y que esta tecnología puede ser el futuro de la medicina moderna.
IA EN LA INDUSTRIA
En el mundo de la Ingeniería e Industria, la IA ha llegado para transformarse en un aliado inseparable en cuanto a optimización de procesos productivos, desarrollo rápido y sostenible de proyectos con diseños innovadores, desde la creación de escaneos y prototipos, hasta el apoyo en la fabricación de piezas complejas.
Esta nueva herramienta generará cambios significativos en estos sectores y harán que haya menos empleados humanos, por lo que la sugerencia es que la humanidad debe prepararse para adaptar los conocimientos y habilidades a estas nuevas dinámicas.
El ingeniero Rafael Mendoza indicó que la inteligencia artificial permitirá hacer más corto el tiempo del proceso en las diferentes áreas, bien sea en la industria manufacturera y en el área de servicios. “Tenemos que verla como una aliada”.
Mendoza enfatizó que el reto es aprender a convivir con estas nuevas tecnologías y que lo más importante es entender que está desarrollada para poder mejorar la calidad de vida y utilizarla para lo que fue creada, tener disponibilidad de más tiempo libre, poder desarrollar soluciones mucho más eficientes y amigables con el medioambiente.
Para Mendoza habrá una generación que tiene que adecuarse a esta nueva tecnología, “la que no lo haga será inevitablemente desplazada en lo que se refiere al campo laboral”.