Agencia EFE
Entre las canciones y el colorido de la artista alemana Leony, del grupo estadounidense OneRepublic y del trío electrónico italiano Meduza, emergió la gran figura de Franz Beckenbauer, fallecido hace seis meses y homenajeado en la ceremonia de inauguración de la Eurocopa para impregnar con su aura mítica un torneo que tuvo su pistoletazo de salida con el Alemania-Escocia.
El pasado 7 de enero, en Salzburgo (Austria), falleció el mejor jugador de la historia de Alemania. Desapareció a los 78 años dejando un legado impresionante de títulos y victorias con el Bayern Múnich y la selección alemana.
De este modo, Alemania tuvo a tres representantes de los tres títulos que ha ganado (1972, con Heidi en el lugar de Beckenbauer, 1980 con Dietz y 1996 con Klinsmann). La grada del Allianz Arena ovacionó a los tres. Fue el mayor aplauso de toda la ceremonia. Y eso que, con anterioridad actuaron OneRepublic, Leony y Meduza, que interpretaron “Fire”, el tema oficial de la Eurocopa.