El Sudamericano Sub-20, que tiene a Venezuela como epicentro de la acción, sigue su curso hacia las primeras etapas decisivas. Este martes, la Vinotinto no tuvo actividad, algo que sí tuvo el Grupo B, con los duelos entre Argentina-Bolivia y Colombia-Ecuador.
Con esos juegos finalizados, ya serán tres fechas del torneo de las cinco prevista, cantidad suficiente para empezar a perfilar lo que puede ocurrir con las selecciones de obtener ciertos resultados.
En el caso venezolano, la situación actual es favorable, pero tiene que ratificarlo en el compromiso de esta noche contra Paraguay, en el que una victoria podría asegurar su lugar en la siguiente instancia del certamen.
En el Grupo A en este momento, Uruguay y Chile son líderes, en ese orden, porque los charrúas mejoran a los chilenos en el diferencial de goles (+7 contra +1), este aspecto no es menor, porque justamente es el que ayuda a los criollos a superar a los paraguayos en el tercer puesto (último cupo), pese a contar con los mismos puntos (tres).
En este apartado Venezuela saca ventaja por el diferencial de +3 que goza desde la goleada a Perú (0-4), un caso contrario al de los paraguayos que ostentan un -5, tras caer estrepitosamente (6-0) con Uruguay.
Con este panorama hay que ir a los criterios de desempate, del que los venezolanos se agarrarían para asegurar el boleto para lo que viene y en el que el primero no es el diferencial de goles. Según las reglas previstas en estos casos, la primera norma para desempatar será el resultado directo entre ambos equipos igualados en puntos.
Es decir, que si la Vinotinto gana a Paraguay le tendría ventaja en dos criterios, el enfrentamiento directo y el diferencial de goles, más allá de lo que puedan hacer los guaraní en su última fecha contra Chile. Otorgándoles la clasificación al hexagonal final en Caracas y Puerto La Cruz.