La insólita historia de una mujer brasilera identificada como Érika de Souza, quien llevó a su tío muerto a un banco en Río de Janeiro para hacer el retiro de un préstamo, le sigue dando la vuelta al mundo.
Se conoció que esta mujer fue dejada en libertad por las autoridades de Brasil, aunque el proceso por los delitos de profanación de cadáver, tentativa de estafa y malversación de fondos continúan activos.
De acuerdo con TV Globo, la jueza del caso, Luciana Mocco, rechazó mantener detenida a Érika de Souza, ya que, para ella, no representa un peligro para el orden público, así que la puso en libertad provisional.
La jueza mencionó en su decisión que “a pesar de la gran repercusión del caso en las redes nacionales e internacionales, ya que el video tomado en el interior de la sucursal bancaria fue ampliamente difundido en las redes sociales, no se justifica la medida excepcional de privación de libertad”.
LOS HECHOS
De Souza se presentó a un banco de Río de Janeiro, Brasil, con el cadáver de su tío, para retirar un préstamo de 17.000 reales, casi 13 millones de pesos colombianos.
En un video grabado por los empleados del banco se puede ver cuando la mujer intenta de varias maneras sostener el cuerpo sin vida de su tío, lo cual hizo sospechar a los trabajadores de la entidad, quienes tomaron la determinación de llamar a las autoridades.
El responsable de la sucursal bancaria manifestó que “ella intentó simular que él lo firmaba. Ya entró muerto al banco”.
Las autoridades llegaron hasta el sitio, constataron que Paulo Roberto Braga llevaba unas cuantas horas de fallecido y trasladaron el cadáver a Medicina Legal.
“Tío, ¿estás escuchando? Necesitas firmar. Si no firmas, no hay manera. No puedo firmar por ti. Firma para no darme más dolores de cabeza”, le decía Érika de Souza al cuerpo inerte de su familiar.
La entidad financiera declaró que llamó a las autoridades tan pronto se percató del intento de estafa y afirmó estar dispuesta a colaborar con la justicia para esclarecer el caso.
Con información de Noticias Caracol