Las paredes revestidas tienen por objeto cubrir, disfrazar o simular. En la actualidad, es una tendencia decorativa que está tomando auge por su capacidad de proteger una superficie.
En otras palabras, esta capa que permite decorar tanto interiores como exteriores ayuda a enriquecer los espacios en el hogar.
Entre las alternativas a utilizarse se encuentran los revestimientos en papel, madera natural, microcemento, PVC y cerámica. Esta última es la más utilizada sobre todo para enmarcar chimeneas y destacar algunas áreas en las habitaciones.
Paredes revestidas con cerámicas
Este es uno de los revestimientos más tradicionales y además seguros. Este siempre es un acierto, sobre todo en baños, cocinas, jardines y lugares con humedad, ya que son resistentes.
Además, otra ventaja de este material para lucir paredes revestidas es que ha ido evolucionando con el paso del tiempo en cuanto a colores y texturas. Gracia a ello, se pueden utilizar para decorar de manera creativa cualquier espacio, permitiendo que los salones luzcan más refinados.
Otra ventaja de este decorativo es que es capaz de crear un gran impacto visual en el área, simulando desde madera, piedra, ladrillo, etc. Es decir, este decorativo proporciona no solo color, sino también diferentes texturas, acabados y diferentes patrones decorativos.
Cabe acotar que, tienen como desventaja, que al tener juntas, requieren de una limpieza continua para evitar que se acumule la suciedad y genere un aspecto desagradable.