Las plumas tienen un papel esencial en la vida de los loros, éstas no solo engalanan al animal aportándole color, sino que además son esenciales al momento de reproducirse.
Por otra parte, ayuda a que la mascota se aísle de las inclemencias ambientales y lo más importante, son fundamentales para mantener la aerodinámica durante el vuelo.
Es decir, son esenciales en la vida de nuestras mascotas, por lo que debemos cuidarlas en todo momento, incluso cuando está en el proceso de muda.
Caída de las plumas
Expertos en el cuidado animal aseguran que la muda en los loros es un proceso fisiológico natural y consiste en la caída de las plumas antiguas, las cuales serán renovadas por las de nuevo crecimiento.
La muda en los loros se ejecuta de manera completa una o dos veces al año, y es especialmente acentuada entre los meses de junio y octubre.
Debes tener en cuenta que el aspecto de las plumas muchas veces es un indicador de la salud del ave, por tanto, si crees que no es normal, consulta con el veterinario.
En este sentido, una muda correcta deja un plumaje sano y brillante, por lo que, si existen plumas dañadas, con mal aspecto o coloración anómala puede significar que algo no va bien.
Por otra parte, debes considerar que el proceso representa un estés para el animal porque pierden gran porcentaje del peso corporal.
Su cuidado
Para que el proceso de muda se lleve a cabo correctamente, debes proporcionarle al loro estos cuidados:
– Dar una alimentación adecuada que le aporta al animal los nutrientes y minerales necesarios para que el plumaje sea bonito, suave y flexible.
– Mantener la higiene y un estado de salud optimo para evitar infecciones al momento de que el loro comience a mudar las plumas.
– Cuidar que la habitación donde se encuentra la jaula del animal esté ventilada para evitar que las plumas se sequen demasiado rápido.
– Evitar darles baños de sol en exceso. Aunque el sol es necesario para conseguir vitamina D necesaria para realizar la síntesis del calcio, pero en el proceso de muda no es conveniente porque el plumaje perderá brillo.
– Lavar al loro con frecuencia para que la piel se mantenga elástica y las plumas despunten sin dificultad; y así evitar que se produzcan quistes porque la pluma crezca por debajo de la piel.
Con información de Diario 2001
