Los suspiros de monja son una especie de buñuelos creados “accidentalmente” por una monja que dejó caer en aceite muy caliente, un pedazo de pasta choux, de ahí su nombre. También se dice que este se debe a lo ligero que son, como un suspiro.
En esta #RecetaEP te explicamos cómo se prepara este tradicional postre español, que ha conquistado el paladar de muchos.
Ingredientes:
- 300 g de harina
- 1 cucharadita de levadura
- 400 ml de agua
- 200 g de mantequilla
- 400 g de azúcar
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de ralladura de limón
- 5 huevos
- 2 tazas de aceite para freír
- ¼ de taza de azúcar glas para decorar
Preparación:
- Cernir en un recipiente la harina y agregar la levadura. Revolver y reservar. Este paso es muy importante para garantizar el esponjado del suspiro.
- Poner en una olla el agua, la mantequilla, el azúcar, la sal y la ralladura de limón.
- Llevar a hervor y luego retirar del fuego. Toma unos 10 minutos
- Agregar en un solo paso la harina con la levadura y remover hasta que la mezcla se despegue de la superficie de la olla.
- Dejar reposar por 5 minutos
- Añadir un huevo a la masa, y con una cuchara de madera revolver hasta integrar.
- Repetir este paso hasta haber agregado el resto de los huevos.
- Revolver muy bien hasta notar una masa lisa sin grumos.
- Cubrir con un paño de cocina limpio y dejar reposar por 30 minutos.
- Calentar en una sartén profunda el aceite, a fuego medio.
- Tomar una cucharada de la mezcla y verter estas bolitas en el aceite.
- Freír en tandas de 5 bolitas hasta que estén doradas. Toma unos 5 minutos por tanda.
- Retirar las bolitas con una espumadera y colocarlas en una rejilla para escurrir el aceite.
- Repetir el procedimiento con el resto de la masa
- Espolvorear los suspiros con azúcar para adornar.
- Servir y disfrutar.
