¡Alerta por cáncer! Revelan la lista de alimentos que aumentan la incidencia de tumores en jóvenes

Algunos alimentos se consideran cancerígenos debido a la presencia de sustancias que, según estudios científicos, pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer.

Entre estas sustancias se encuentran los compuestos químicos formados durante ciertos métodos de cocción, como el asado o freído a altas temperaturas, que pueden producir hidrocarburos aromáticos policíclicos o aminas heterocíclicas.

Los alimentos procesados, como embutidos y carnes curadas, contienen nitritos y nitratos que pueden transformarse en compuestos cancerígenos en el cuerpo.

También se ha relacionado el consumo excesivo de carnes rojas con un mayor riesgo de cáncer colorrectal. Por otro lado, aditivos, pesticidas y contaminantes ambientales pueden contribuir al potencial cancerígeno de algunos productos.

No se trata solo del alimento en sí, sino también de su preparación, frecuencia de consumo y combinación con otros factores de estilo de vida. Mantener una dieta equilibrada y basada en alimentos frescos puede ayudar a reducir estos riesgos.

En un reciente artículo de Noticias de Gipuzkoa, el cardiólogo Aurelio Rojas advierte que la incidencia de cáncer en personas jóvenes ha aumentado más de un 80 % en las últimas décadas, afectando a tumores como el de colon, mama, páncreas o próstata.

Según Rojas, este preocupante fenómeno estaría vinculado a niveles crónicamente elevados de insulina, una hormona que no solo regula el metabolismo de la glucosa, sino que también actúa como “fertilizante” para las células tumorales, estimulando su crecimiento.

El experto pone en el punto de mira dos alimentos muy comunes en la dieta actual: el azúcar y la harina de trigo refinada. Ambos presentan un alto índice glucémico, lo que provoca picos repetitivos de insulina tras su consumo. Este patrón de hiperinsulinemia crea un entorno metabólico propicio para que las células precancerosas proliferen.

Rojas los describe como “asesinos silenciosos” o como ingredientes “que te están matando”, debido a su efecto nocivo tanto para la salud oncológica como cardiovascular.

El mensaje del cardiólogo es claro: “se trata de dos ingredientes ubicuos en productos ultraprocesados como bollería, pan blanco, refrescos o pasta refinada, esenciales para modificar nuestros hábitos alimentarios”. Su consejo es reducir o eliminar estos dos alimentos, priorizando en su lugar una alimentación basada en alimentos “reales” como frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y proteínas magras, y acompañada de ejercicio físico regular, para prevenir no solo enfermedades cardiovasculares, sino también el desarrollo de tumores en edades tempranas.