Mindfulness, ¿has oído este término? Quizás sí, pero sin darle importancia porque no sabes a lo que se refiere.
Sin embargo, en estas líneas te contamos todo lo que debes saber sobre esta práctica y sus beneficios, y luego no querrás dejar de hacerlo.
¿Qué es el mindfulness?
Se define como atención plena. No es otra cosa que una práctica preventiva a través de ejercicios mentales cuyo objetivo es fijar la atención en el momento presente para sentir las cosas tal y como están sucediendo, sin pretender ejercer ningún control sobre ellas.
Esta práctica incluye la meditación y otras técnicas de relajación, que tal y como se define, permite que la persona logre la atención plena o atención consciente.
En qué consiste
En cada sesión se busca que la persona logre un estado de conciencia muy profundo, por consiguiente, se debe primero relajar y no dejar que la mente elabore juicios sobre los sentamientos o sensaciones.
Es decir, en este proceso cada persona se permite reconocer cuáles son sus pensamientos y busca una plena conciencia en el “aquí y el ahora”, se logra una atención total en el presente.
Especialistas señalan que, aunque una sesión debe durar al menos 30 minutos, para los principiantes lo más recomendable es que sean sesiones más cortas y con el tiempo aumentar la duración.
Cabe acotar que, como en la mayoría de las prácticas, con la experiencia podrás mejorar la técnica hasta llegar al estado de concentración que desees.
¿Qué se logra?
Gracias a esta técnica se logra tener conciencia de las sensaciones, pensamientos y sentimientos, además, la persona aprende a ser consciente de sus movimientos, y hasta de las sensaciones tanto físicas como emocionales.
Además, tiene muchos otros beneficios tales como:
– Mejorar la salud física y mental.
– Tener una mejor calidad de vida, sobre todo en aquellas personas que sufren trastorno obsesivo compulsivo, estrés postraumático o trastornos de la personalidad.
– Ayuda a evitar episodios de depresión y ansiedad.
– Puede tener efectos positivos en situaciones de dolor físico y emocional.
– Mejora la memoria.
– Incrementa la capacidad de concentración.
– Sirve como una herramienta útil para trabajar la inteligencia emocional, sin importar la edad que se tenga.
Importante
Busca un lugar tranquilo, sin ruido y con una temperatura agradable, entre 18° y 25°. Intenta desconectarte de la tecnología, es clave buscar un lugar que esté libre de distracciones.
Por ejemplo, aunque tengas el celular en silencio, las ondas pueden interferir con tu meditación.
Cuando mejores tu técnica de concentración, puedes hacer tus sesiones de mindfulness al aire libre, en el parque o jardín.
De igual manera, se recomienda usar ropa cómoda que no sea muy apretada, debes practicarlo sin zapatos y lo más cómodo que puedas, sin ningún accesorio o algo que oprima el cuerpo.
Finalmente, para facilitar la respiración, los expertos recomiendan que la posición sea en el piso y con la espalda recta, puedes sentarte sobre un cojín o un tapate para que sea más cómodo.
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