El pistacho se puede usar como aperitivo, pero también se puede utilizar en la elaboración de ensaladas, salsas, helados, postres, y hasta en recetas de asados. Este fruto seco no solo da color a las preparaciones, sino que dota los platos de grandes nutrientes.
Incluso, a la hora de la merienda es común recurrir a los frutos secos como una alternativa saludable y por supuesto que entre ellos se encuentra el pistacho.
Estos son unos de los que mejor reputación tiene y es que cuenta con un sabor peculiar y además aprovechable en la gastronomía.
Si esto te parece poco, estudios demuestran que su consumo aporta grandes beneficios para la salud y bienestar.
Origen del pistacho
Proviene del alfóncigo o pistachero (Pistacia vera), un pequeño árbol originario de Oriente Medio, habitual en las montañas de Turquía, Grecia, Pakistán, Afganistán, e Irán. Pertenece a la misma familia que el del anacardo.
Según investigadores, Irán es el principal productor mundial de este pequeño fruto de color verdoso, y le sigue Estados Unidos, Nuevo México, o el Norte de África y España.
Conócelo
La cáscara que recubre el pistacho alberga en su interior un fruto verde muy nutritivo, alargado y de un tamaño parecido al de una avellana.
Lo puedes conseguir frito, tostado o con un toque extra de sal, sin embargo consumirlo crudo sigue siendo la opción más saludable.
Propiedades
Esta semilla está respaldada por estudios científicos que certifican que es fuente de antioxidante, proteínas y fibra, y que además, aporta muchos beneficios.
La proporción de nutrientes en los pistachos crudos es muy equilibrada: aportan 20% de proteínas vegetales, tanto como las legumbres, aunque se comen en menor cantidad.
Contienen 28% de hidratos de carbono, que al ser absorbidos lentamente por el organismo proporcionan energía.
Ofrecen 10% de fibra, ideal para ayudar a regular el tránsito intestinal.
Son 44,5% grasas, formadas hasta en un 54% por el monoinsaturado ácido oleico, el mismo que domina en el aceite de oliva o la pulpa del aguacate, beneficiosas para el corazón.
En cuanto a los minerales, el pistacho es el fruto seco más rico en hierro y el más abundante en potasio (1g por cada 100), lo que lo hace recomendable para controlar la tensión arterial.
También contiene vitamina A, B6, E, K, potasio, zinc, magnesio, fósforo, hierro y calcio.
Beneficios
- Ayuda a regular el colesterol.
- Protege de la hipertensión arterial.
- Equilibra los niveles de azúcar, previniendo el riesgo de sufrir diabetes.
- Saciante.
- Potencia la absorción de hierro evitando la anemia.
- Fuente de antioxidante.
- Favorece el tránsito intestinal.
- Previene el envejecimiento y algunas enfermedades como el cáncer, y el alzhéimer.
- Reduce el estrés.
- Previene la obesidad.
- Protege la vista.
- Mejora el estado de la piel.
- Fortalece las células de la epidermis.
- Favorece el bronceado.
- Incrementa la síntesis de colágeno y regula la formación de queratina.
- Es afrodisiaco y favorece la erección.
Gastronomía
Propiedades del pistacho:
En Oriente Medio es un ingrediente básico en repostería. En países occidentales, además de servir de aperitivo o snack, se utiliza en la elaboración de helados, a los que confiere su color verde.
En la cocina mediterránea, se pueden encontrar un sinfín de recetas con pistacho. Desde primeros platos con atractivas salsas tipo pesto de pistacho, como espaguetis o timbales de arroz, quinoa o cuscús.
También es buen compañero del desayuno con cereales así como del arroz, el cuscús o la quinoa. Incluso puede formar parte de las cremas de verduras, las galletas, helados, yogures, postres de soja, natillas de maíz, en compota, pasteles, bizcochos, crepes y flanes.
No obstante, los expertos señalan que para ello lo más apropiado es escoger el pistacho natural, crudo, sin salar ni tostar.
Con Información del Diario 2001.
