Los videos cortos de TikTok e Instagram, conocidos por captar la atención de millones de usuarios con contenido rápido y visualmente atractivo, podrían muy pronto dejar de ser exclusivos del celular.
Ambas plataformas están desarrollando versiones específicas para televisores inteligentes, con el objetivo de competir directamente con YouTube en el terreno del streaming doméstico, reporta Canal26 en su portal web
Según información publicada por el medio, tanto TikTok como Instagram trabajan en adaptar sus aplicaciones para sistemas como Android TV, Samsung, LG y Fire TV.
La idea es llevar los populares reels y tiktoks al formato televisivo, ampliando su alcance a nuevos públicos y generando nuevas oportunidades de monetización.
¿Cómo funcionará esta nueva experiencia?
Aunque aún no se han revelado todos los detalles técnicos, se espera que las versiones para TV incluyan:
- Navegación con control remoto
- Reproducción automática de contenido
- Interfaz adaptada al formato horizontal
- Posibilidad de explorar videos por categorías o tendencias
Uno de los principales desafíos será adaptar el formato vertical de los videos a las pantallas grandes, sin perder la experiencia de desplazamiento fluido que caracteriza a estas plataformas en dispositivos móviles.
¿Por qué ahora?
El auge de los contenidos breves y la mejora en su calidad visual han llevado a muchos usuarios a proyectar estos videos en sus televisores mediante duplicación de pantalla o dispositivos como Chromecast.
Con una app nativa, ese proceso se simplificaría y abriría una nueva vía de ingresos publicitarios para Meta (Instagram) y ByteDance (TikTok).
TikTok ya había incursionado en este terreno entre 2021 y 2023, pero varias de sus versiones para TV fueron retiradas en febrero de 2025 por razones regulatorias en Estados Unidos. El nuevo desarrollo apunta a un relanzamiento más robusto y global.
En el caso de Instagram, sería su primera incursión oficial en el ecosistema de Smart TVs.
¿El fin del dominio de YouTube?
Con esta movida, TikTok e Instagram buscan disputar el espacio que YouTube ha consolidado en los televisores del mundo. El contenido breve ya no se conforma con dominar el smartphone: ahora quiere conquistar también el salón de casa.