Panamá supera el umbral de las 400.000 personas llegadas al país a través de la selva del Darién en su viaje irregular hacia Norteamérica, un registro inédito que muestra la magnitud de una creciente crisis migratoria en América que se intenta atajar con más deportaciones.
Cifras del Servicio Nacional de Migración de Panamá a las que tuvo acceso EFE dan cuenta de que hasta las 6.00 a.m. de este miércoles 27, 399.606 migrantes habían entrado en lo que va de este año al país, a un ritmo de más de 2.000 personas por día a lo largo de septiembre.
Es un récord histórico que deja atrás los 248.000 migrantes registrados en 2022 y los 133.000 de 2021, y que se vislumbraba entre los escenarios más críticos de este fenómeno de migración masiva y visible que comenzó en 2015 con el tránsito de miles de cubanos hacia Estados Unidos.
Con información de El Público TV