Un agente federal antinarcóticos filtraba información confidencial sobre uno de los principales blancos criminales de Washington en Venezuela como parte de un plan para vender secretos del gobierno a abogados defensores que buscaban atraer a clientes ricos, se declaró en un juicio esta semana.
En una llamada telefónica intervenida, el agente de la DEA John Costanzo Jr. reveló la fecha exacta de 2019 en que los fiscales en Miami pensaban presentar cargos contra el empresario Alex Saab por presuntamente desviar 350 millones de dólares de contratos del Estado.
La filtración, que toma estado público por primera vez, es un nuevo caso bochornoso de conducta delictiva por parte de un agente del principal organismo antinarcóticos de Estados Unidos y podría complicar aún más el dificultoso caso del Departamento de Justicia contra Saab.
Antes de su arresto, el mismo Saab era un informante de la DEA, se reunía con agentes fuera de Venezuela, renunciaba a ganancias ilegales por valor de millones de dólares y aceptaba ayudarlos a profundizar su investigación del círculo íntimo de Maduro, según los fiscales.
AP