El secretario general de la ONU, António Guterres, ha mostrado su preocupación por la reciente escalada de tensiones entre Guyana y Venezuela por la disputa territorial del Esequibo, bajo control de Georgetown pero que Caracas reclama como propio.
«(Guterres) sigue con preocupación la reciente escalada de tensión entre Guyana y Venezuela por la controversia fronteriza entre ambos países. Confía en la buena fe de ambas partes para impedir cualquier acción que agrave o prolongue la controversia», ha declarado el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, en un comunicado.
Asimismo, ha explicado que el secretario general no se posiciona al respecto y ha recordado que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) será el organismo que dicte una solución.
Las tensiones han aumentado en las últimas semanas después de que el Gobierno venezolano anunciase un referéndum programado para principios de diciembre con el objetivo de conocer «la opinión de los ciudadanos» al respecto.
Además, Venezuela ha acusado en numerosas ocasiones al Gobierno de Guyana de usar un discurso agresivo y militarista y de intentar involucrar al Ejército de Estados Unidos para una intervención en su contra.
El Esequibo es un territorio de 159.542 kilómetros que posee importantes recursos naturales –petroleros, gasísticos, mineros, hidráulicos y forestales– y un gran potencial turístico. Está administrado por Guyana conforme a una sentencia arbitral de 1899.
En concreto, Guyana argumenta que Caracas accedió a renunciar al Esequibo después del fallo en 1899, pero que Venezuela posteriormente se retractó de la decisión. Por su parte, Caracas se apoya en el acuerdo firmado en 1966 en Ginebra entre Venezuela y Reino Unido, antigua potencia colonial de Guyana, el cual reconoce que el Esequibo es un territorio en disputa.
La CIJ abrió un caso a petición de Guyana en 2018 y desde entonces se ha pronunciado para declararse como competente al respecto, a pesar del rechazo de Venezuela a este proceso judicial.
|| Con información de Europa Press