La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo hoy que no es posible perder un solo hospital más en la Franja de Gaza, donde los que siguen funcionando lo hacen de forma restringida por la falta de electricidad, de suministros, de personal, por daños sufridos en los bombardeos y por la enorme afluencia de heridos.
“No podemos permitirnos perder un solo hospital, una sola cama más. Estamos muy preocupados por la destrucción de las instalaciones sanitarias sobre todo en el norte (de Gaza)”, dijo el representante de la organización en los territorios palestinos ocupados, Richard Peeperkorn.
Precisó que en el norte de Gaza solo quedan tres pequeños hospitales que están apenas funcionando, mientras que en el sur (donde se encuentra la gran mayoría de la población desplazada), los centros sanitarios están completamente saturados.
El fin de la tregua de algunos días acordada entre Israel y el movimiento islamista Hamás pone ahora en riesgo la integridad de los hospitales en el sector sur de Gaza y de dejarlos fuera de servicio, como ha ocurrido con la gran mayoría de los que operaban en el norte, donde se encontraban los más grandes y modernos debido a que allí había considerablemente más habitantes que en el sur.
La ciudad de Gaza, que hacía las veces capital, se encuentra en el norte, pero ha sido ampliamente arrasada por la ofensiva israelí.
Si antes Gaza tenía una capacidad de 3.500 camas de hospital, ésta se ha reducido a 1.562, mientras que se estima que se necesitan 5.000 camas adicionales con absoluta urgencia
A pesar de que en los días en los que se detuvieron los bombardeos la entrada de ayuda humanitaria aumentó considerablemente, Peeperkorn aseguró que los hospitales activos siguen careciendo de suministros médicos, de combustible (para la generación de electricidad), agua y alimentos.
En la misma rueda de prensa y hablando desde Gaza por videollamada, el coordinador de emergencia de la OMS, Rob Holden, dijo que había visitado el jueves el Hospital Nasser (el más grande operativo en el sur), que tiene 315 camas, pero está atendiendo más de 700 pacientes.
Del Hospital Al Aqsa señaló que, frente a 200 camas que tiene a disposición, ahora alberga a 6000 pacientes, mientras que el Hospital Europeo tiene 370 camas, pero ha admitido a más de 900 pacientes.
“Los pacientes están por todos lados, es realmente catastrófico y muy duro para el personal sanitario gestionar un número tan inmenso de pacientes que están tirados en el suelo” comentó Holden.