Decenas de miles de personas han tomado las calles de varias ciudades de Israel después de que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, anunciara que había destituido al ministro de Defensa, Yoav Gallant, argumentando que entre ambos existían “brechas significativas en la conducción de la guerra”, sumado a las supuestas “declaraciones y acciones que contradecían las decisiones del Gobierno y del gabinete” por parte del ahora exministro.
Las protestas fueron convocadas en las ciudades de Jerusalén, Tel Aviv, Haifa y Cesarea, donde los manifestantes han bloqueado las cruces y autopistas. En Jerusalén, miles de personas se congregaron en la calle Azza, cerca de la casa de Netanyahu.
La organización The Day After invitó a los ciudadanos a manifestarse contra la decisión de Netanyahu con el mensaje: “¡Basta ya! Hemos tenido suficiente. El primer ministro ha decidido perjudicar la seguridad del país para mantener su coalición”.