||Redacción El Periodiquito
El presidente colombiano, Gustavo Petro, nombró “gestores de paz” a los principales exjefes paramilitares que dejaron las armas hace dos décadas; esta es una figura que no les da beneficios judiciales, pero permite que ayuden en acercamientos con actores armados ilegales.
En un decreto divulgado el martes, el presidente autoriza a 18 exjefes paramilitares para actuar como gestores de paz dentro de su política de “paz total”, con la que adelanta diálogos simultáneos con grupos armados ilegales en el país.
En la lista figuran quienes fueron los principales cabecillas paramilitares, autores de miles de delitos —la mayoría por línea de mando—, algunos de ellos incluso extraditados a Estados Unidos y condenados por delitos de narcotráfico.
La designación como gestores de paz será de seis meses y sus actividades serán desarrolladas en las “condiciones excepcionales”, donde defina la oficina de paz del gobierno, sin que se modifique su “situación jurídica, ni las medidas de aseguramiento vigentes, o su régimen de libertad, ni con-lleva beneficios judiciales”, indica el decreto.