La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó este viernes a la administración del presidente Donald Trump a revocar el parole humanitario creado bajo el gobierno de Joe Biden, una decisión que deja en el limbo a más de 500.000 personas, muchas de ellas cubanas.
Con esta medida, queda sin efecto una orden de una corte menor que había impedido la eliminación del programa. Ahora, la administración Trump podrá continuar con su plan de cancelar de manera masiva los permisos otorgados a migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, quienes ingresaron a Estados Unidos de forma legal y con patrocinador.
El programa de parole humanitario permitió desde 2022 la entrada legal de más de 532.000 migrantes con patrocinadores financieros en EE UU, provenientes de países marcados por la inestabilidad como Ucrania, Afganistán, Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela. Los beneficiarios recibieron permisos por dos años y debían costear su viaje y tener respaldo económico.
La administración Trump argumenta que el parole nunca fue permanente y que la ley no obliga a revocar los beneficios uno por uno. El fiscal general D. John Sauer alegó que hacerlo así sería una tarea “gigantesca” que retrasaría los planes del gobierno de deportar a quienes considera inadmisibles.