AP
El número de víctimas mortales ascendió a 11 el miércoles cuando las autoridades aún atendían las consecuencias de un alud provocado por fuertes lluvias en el departamento de Antioquia, en el noroeste de Colombia.
La emergencia se registró en la madrugada de ayer en los límites de los municipios de Bello y Medellín, donde varios barrios quedaron cubiertos de agua y sedimentos.
El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, lamentó el fallecimiento de 11 personas en su cuenta de X, antes Twitter. La víspera las autoridades habían informado sobre 10 muertos.
Los organismos de socorro continúan escarbando en la tierra y los escombros buscando al menos a 15 personas reportadas como desaparecidas. Advirtieron que el riesgo es latente, especialmente en Bello, donde se desprendió una ladera, por lo que pidieron a las familias evacuar de inmediato.
Más de 1.300 personas se encuentran en albergues habilitados tras la emergencia que incluyen colegios, un salón comunal, hoteles y una guardería para mascotas, indicó Gutiérrez, asegurando que garantizarían ayuda humanitaria. Se ordenó evacuar cerca de 60 viviendas de manera temporal o definitiva por afectación en su estructura.
