La Corte Suprema de Justicia autorizó al gobierno de Donald Trump a tomar medidas para implementar su polémica propuesta de eliminar la ciudadanía automática por derecho de nacimiento.
El alto tribunal, de mayoría conservadora, accedió a la solicitud del gobierno de Trump de limitar el alcance de las medidas cautelares impuestas por los jueces a nivel nacional, de modo que se apliquen únicamente a los grupos e individuos que presentaron la demanda.
Esto significa que la propuesta de ciudadanía por nacimiento puede avanzar tanto en los estados que la impugnaron como en los que no.
La corte se dividió ideológicamente, con los conservadores como mayoría y los liberales en desacuerdo.
El esperado fallo se dio en respuesta a una serie de solicitudes de emergencia del gobierno de Donald Trump sobre si los jueces de los estados de Maryland, Massachusetts y Washington se extralimitaron en su autoridad al emitir mandatos judiciales en todo el país al bloquear su orden ejecutiva contra la ciudadanía por nacimiento.
El alto tribunal no abordó la legalidad ni constitucionalidad del plan de Trump, que busca limitar la ciudadanía por nacimiento a las personas que tengan al menos un progenitor ciudadano o residente permanente de Estados Unidos.
LOS DETALLES DEL FALLO DE LA CORTE SUPREMA
Los magistrados del alto tribunal, que cuenta con una mayoría conservadora de 6 a 3, se centraron en si los jueces federales tienen la facultad de bloquear la orden de Trump en todo el país mientras continúa el litigio.
La política permanece bloqueada por ahora en un estado adicional, Nuevo Hampshire, como resultado de una demanda independiente que no se encuentra ante la Corte Suprema.
«Cuando un tribunal concluye que el poder ejecutivo ha actuado ilegalmente, la solución no es que el tribunal también se exceda en sus facultades», escribió la jueza Amy Coney Barrett en representación de la mayoría.
En desacuerdo, la jueza Ketanji Brown Jackson escribió que la decisión representaba «una amenaza existencial para el estado de derecho».
La corte también indicó que el gobierno de Trump puede continuar trabajando administrativamente en la implementación de la política.
Como resultado, la propuesta ahora puede avanzar a nivel nacional, aunque los demandantes individuales aún podrían presentar sus propias demandas en esos estados y los demandantes actuales aún pueden solicitar el restablecimiento de medidas cautelares de alcance menos amplio. La orden ejecutiva original de Trump establecía que el plan entraría en vigor después de 30 días, pero fue bloqueada casi de inmediato.
EL PLAN DE TRUMP CONTRA LA CIUDADANÍA POR NACIMIENTO
Solo minutos después de su juramentación, el presidente Donald Trump cumplió el lunes una de sus promesas de campaña al emitir una orden ejecutiva para acabar con la ciudadanía por derecho de nacimiento.
¿Cuál es su propósito? Poner fin a la ciudadanía por derecho de nacimiento para futuros niños nacidos de madres que se encuentren ilegalmente o temporalmente en Estados Unidos, a menos que el padre del niño esté con un estatus legal en el país y permanentemente.
La orden también dice que el gobierno federal no debe reconocer a los niños como ciudadanos estadounidenses si nacieron de madres que tenían un estatus legal, pero temporal en el país y el padre no era ciudadano estadounidense o residente permanente legal en el momento del nacimiento.
La orden establece que los niños nacidos de residentes permanentes legales, conocidos como titulares de la tarjeta verde, tienen derecho a la ciudadanía.
«¡La ciudadanía por nacimiento no fue concebida para que la gente se tomara vacaciones para convertirse en ciudadanos permanentes de los Estados Unidos de América, trayendo consigo a sus familias, y riéndose todo el tiempo de los ‘tontos’ que somos!», dijo Trump en una publicación en Truth Social.
QUÉ ES EL DERECHO DE CIUDADANÍA POR NACIMIENTO
El derecho, también conocido como “jus soli” (que significa “derecho de suelo”), implica que toda persona que haya nacido dentro del territorio nacional tendrá la ciudadanía de ese país, sin importar el estatus migratorio de sus padres.
Se ampara en la 14 Enmienda de la Constitución que indica: “Todas las personas nacidas o naturalizadas en Estados Unidos, y sujetas a su jurisdicción, son ciudadanos de Estados Unidos”.
La interpretación tradicional de esta disposición, tal como la han entendido generaciones de estadounidenses, incluyendo juristas de izquierdas y derechas, es que toda persona nacida en territorio estadounidense es ciudadana estadounidense.
Hay algunas excepciones menores, como los hijos de diplomáticos.
El derecho no es un principio exclusivo de Estados Unidos, aunque sí es principalmente común en los países del continente americano, con la excepción de Colombia, Haití, República Dominicana, Suriname y la Guayana Francesa.
Con información de Agencias