Un incendio forestal de importantes proporciones declarado a una veintena de kilómetros de Montpellier (sur de Francia) ya ha arrasado al menos 1.000 hectáreas y moviliza a 650 bomberos y dos aviones Canadairs y uno Dash, informaron hoy las autoridades francesas.
Hasta el momento, se han evacuado preventivamente a 280 habitantes del municipio de Aumelas y a 150 personas invitadas a una boda en Chateau Bas, aunque no se han registrado víctimas entre ellos. Sin embargo, cinco bomberos sí que han resultado heridos leves. Dos carreteras locales han sido temporalmente cerradas.
La Fiscalía de Montpellier ha anunciado una investigación pues se sospecha que el fuego ha sido provocado.
Además de Aumelas, el fuego sigue activo en zonas silvestres de las pequeñas localidades de Saint-Bauzille-de-la-Sylve y Gignac.
La persistente sequía en gran parte de Francia y las olas de calor han provocado un aumento de los fuegos forestales este verano, sobre todo en el suroeste del país, en el departamento de Gironde.