La baja asistencia a las urnas marcó las primera horas de las elecciones locales y regionales peruanas, donde el voto es obligatorio, lo que hizo que muchas mesas electorales no se pudieran constituir al no presentarse los miembros designados y no acudir votantes que se prestaran.
La escena repetida en numerosos puntos de Lima fue la de mesas a las que no acudieron los miembros titulares por lo que, según las normas de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), deben ser reemplazados por los suplentes, algunos de los cuales tampoco estaban presentes.
Cuando esto sucede, de acurdo con lo establecido por la ONPE, «conforman la mesa los electores que estén presentes». Sin embargo, se multiplicaron las escenas de votantes que esgrimían excusas de todo tipo para no quedarse durante toda la jornada electoral.
A las 10.30 hora local (15.30 GMT), cuando habían transcurrido tres horas y media de jornada electoral, la ONPE informó que se habían instalado 41.988 mesas de sufragio a nivel nacional.
Previamente, habían informado de que estaba previsto habilitar 84.323 mesas de sufragio, distribuidas en 11.299 locales de votación.
UR