Estados Unidos estudia aprobar que la petrolera Chevron expanda sus operaciones en Venezuela, pero supedita cualquier anuncio a que el Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro y la oposición reanuden su diálogo en México, indicaron ayer a EFE fuentes conocedoras del caso.
La decisión estadounidense depende de que las partes vuelvan a la mesa de negociaciones e impulsen otros compromisos específicos en apoyo de la población venezolana.
Las fuentes conocedoras apuntaron a EFE que cualquier autorización emitida por el Departamento del Tesoro sería temporal y evitaría que la petrolera estatal venezolana PDVSA reciba los beneficios de las ventas de petróleo de Chevron.
El Ejecutivo estadounidense se reserva además el derecho de revocar los permisos si el Ejecutivo de Maduro no negocia de buena fe o no mantiene sus compromisos.
Un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional Estadounidense añadió ayer a EFE que Estados Unidos se suma a la comunidad internacional a la hora de saludar la reanudación de las negociaciones entre el régimen de Maduro y la Plataforma Unitaria, que agrupa a la oposición.
Asimismo, señaló, que se busca “apoyar a la población venezolana y defender a aquellos venezolanos que quieren una vuelta pacífica a la democracia”.
El portavoz sostuvo que su país está deseando ver resultados concretos de la negociación prevista en México y se mantiene en “estrecho contacto” con la Plataforma Unitaria.
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