Corea del Norte dijo ayer que está preparada para contrarrestar los movimientos militares de Estados Unidos con la “fuerza nuclear más abrumadora”, al tiempo que advirtió que la ampliación de las maniobras militares conjuntas entre Washington y su vecino y rival Corea del Sur estaban llevando las tensiones a una “línea roja extrema”.
El comunicado del Ministerio de Exteriores de Pyongyang respondía a las declaraciones del secretario estadounidense de Defensa, Lloyd Austin, quien el pasado martes explicó en Seúl que su país aumentará el despliegue de activos militares avanzados en la Península de Corea, incluyendo aviones de combate y portaaviones, mientras refuerza los ejercicios combinados y la planificación operativa con el Sur.
Las preocupaciones de seguridad surcoreanas han aumentado desde que el Norte disparó docenas de misiles en 2022, algunos de ellos con capacidad nuclear diseñados para alcanzar objetivos en el Sur y en territorio continental estadounidense.
En una declaración atribuida a un vocero no identificado del Ministerio de Exteriores, el Norte apuntó que la expansión de las maniobras de los aliados amenaza con convertir la península en un “enorme arsenal de guerra y en una zona de guerra más crítica”. El país está preparado para contrarrestar cualquier desafío militar de los aliados en el corto o en el largo plazo con la “fuerza nuclear más abrumadora”, agregó.