El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso amenazó con, llegado el momento, aplicar la llamada “muerte cruzada”, lo que implica la convocatoria de elecciones anticipadas tras la disolución de la Asamblea Nacional, que desarrolla un proceso para destituirlo.
Lasso dijo que disolverá el Congreso y convocará a elecciones anticipadas si no reúne suficiente apoyo en la Asamblea Nacional antes de una posible destitución, para la cual hay luz verde desde la dirección del parlamento.
En una entrevista con Financial Times, Lasso hizo estas declaraciones un día después de que sus abogados pidieran a los legisladores que declaren inadmisible el juicio político y negaran las acusaciones de malversación de fondos contra el presidente, en el contexto de un gran escándalo de corrupción.
En ese sentido, Lasso anunció que, de convocar a una muerte cruzada, y con ello las elecciones anticipadas para la Presidencia, él se presentará nuevamente como candidato, aunque las encuestas le dan alrededor de un 22 % de aprobación.
Los diputados de la oposición necesitarán 92 votos de los 137 miembros de la Asamblea para declarar culpable a Lasso si el proceso de juicio político llega a la fase final.
La entrevista se produce justo cuando la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional definió el lunes el cronograma para la comparecencia de testigos como parte del proceso de juicio político contra el presidente Lasso.
En total serán más de 40 personas entre funcionarios públicos, asambleístas, constitucionalistas, penalistas y periodistas que rendirán a partir del martes su versión dentro del procedimiento contra el mandatario, acusado de malversación.
Las acusaciones de malversación se relacionan con un contrato de transporte de petróleo crudo entre la empresa pública Flota Petrolera Ecuatoriana (Flopec) y la empresa privada Amazonas Tanker Pool Company LLC.