El impacto del fenómeno de El Niño en la producción agrícola aumentará aún más los precios e incrementará la inseguridad alimentaria aguda previsiblemente en América Central, sobre todo en El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, alertaron este lunes la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA).
Los pronósticos estacionales sugieren una alta probabilidad de lluvias y temperaturas por encima en el período de junio a agosto, indica el informe publicado hoy relativo a las perspectivas de los llamados hotspots o puntos críticos del hambre, desde junio a noviembre de 2023.
“Es probable que las condiciones secas en este período conocido como El Niño afecten la cosecha principal de maíz en etapas críticas para el rendimiento de los cultivos, con efectos adversos en la producción”, se indica en el documento.
Además, añade, “se espera que la sequía producto del fenómeno El Niño persista durante el período de agosto a octubre, lo que posiblemente también afecte la cosecha principal de frijol”.
“La disminución en las cosechas de granos básicos en 2023 podría reducir las reservas de alimentos para el consumo y la venta, aumentando la dependencia del mercado de 1,9 millones de pequeños agricultores en Centroamérica, después de que ya se han visto comprometidos por los efectos de la pandemia del covid-19 y la guerra en Ucrania”, agregó.
Con la información de El Nacional
