Según la versión de familiares, las visitas a los presos están suspendidas desde el miércoles, 1 de noviembre. La situación a las afueras es de nerviosismo por la inminente intervención del penal ubicado en Maturín.
La incertidumbre sobre la toma de la cárcel de La Pica crece entre las familias de los reclusos. Este jueves, 2 de noviembre, denunciaron que desde el fin de semana, cuando hubo visita, hay niños adentro. Sin embargo, la cantidad de menores de edad no fue precisada.
Las mujeres que esperan noticias de los presos mencionaron que entre los niños hay uno con discapacidad motora. Una mujer aseguró que tiene a sus tres nietos adentro y que no ha podido verlos. “Uno de ellos tiene una condición especial”, sostuvo sin querer identificarse.
El grupo de familiares asegura que las madres de esos niños están afuera de la cárcel, esperando que autoridades militares y carcelarias les den la orden de pasar a buscarlos.
Al respecto, entre las personas para saber quiénes tenían hijos dentro del penal, pero nadie accedió a hablar.
Por otra parte, las personas aseguran que desde el miércoles, 1 de noviembre, las visitas están suspendidas y el ingreso de alimentos es limitado.
“Ayer (miércoles) hicieron el simulacro de dejarnos pasar. Fue un simulacro porque algunos entraron y cuando llegaron a prevención los regresaron”, dijo la esposa de un detenido.
Un nutrido grupo de personas aguarda por la supuesta intervención del penal desde el miércoles 1. La cárcel está ubicada en la parroquia La Pica de Maturín, estado Monagas, y alberga a unos 1.400 presos.
Tanquetas en las calles
“Queremos saber qué pasa, esto nos tiene mal. Las tanquetas desplegadas nos indican que van a entrar”, dijo la mamá de un preso, en referencia a 15 tanquetas en la vía que conduce hacia el Centro Penitenciario de Oriente.
Los vehículos militares estuvieron fuera hasta media mañana y luego la mitad fue guardada. El hecho generó angustia entre los allegados, que desde la madrugada se movilizaron hasta el recinto carcelario.
Afuera de la cárcel, la orden del Ministerio de Interior y Justicia es la misma: no se permiten aglomeraciones en el portón. “Nos piden que estemos de este lado, como apartados y escondidos. ¿Por qué nos quieren esconder?”, cuestionó.
Las familias insisten en que no hay necesidad de realizar traslados, pues la cárcel de La Pica se ha mantenido tranquila, sin agresiones entre la población reclusa. Pero ante la inminente toma solo piden que lleven a los presos a Sucre, porque es el estado más cercano a Monagas.
Con información de El Pitazo
