La tos es uno de esos síntomas que comúnmente se hacen presente cando se tiene gripe, catarro o alguna enfermedad que compromete las vías respiratorias, los bronquios y pulmones, por ejemplo.
Generalmente, la tos puede aparecer como una señal de alarma para lo que puede estar ocurriendo en el cuerpo, por lo que es indispensable consultar con un médico para que lo evalúe y evitar la automedicación.
Deben tener en cuenta que no todos los jarabes que se venden con la indicación de que es para aliviar la tos, son realmente efectivos en todos los casos.
Es un reflejo que mantiene despejada la garganta y las vías respiratorias. Ésta aunque puede resultar molesta, ayuda al cuerpo a curarse o protegerse.
Cabe acotar que, la tos puede tener causas que no se deben a una enfermedad subyacente, como por ejemplo, despejar las vías respiratorias de los irritantes, como el humo.
También debes tener presente que la tos puede ser aguda o crónica. La aguda comienza súbitamente y no suele durar más de 2 o 3 semanas. Los cuadros agudos son los que se adquieren frecuentemente con un resfrío, una gripe o bronquitis aguda. La tos crónica dura más de 2 o 3 semanas, y la causa puede ser por: bronquitis crónica, asma, reflujo gastroesofágico, enfermedades de la garganta, entre otros.
Te puede interesar: Remedios caseros para tratar la tos seca
¿Cómo tratarla?
Como señalamos, es indispensable que la tos sea evaluada por un médico y que sea éste quien determine cómo se debe tratar porque la automedicación e ingesta dejarabes es contraproducente, aunque sean de venta libre.
Las abuelitas siempre han recomendado los baños de vapor como una buena opción para tratar la tos, y mientras logras que el especialista te chequee, no pierdes nada con intentarlo.
Esta opción en algunos casos de tos seca, puede dar alivio sintomático, gracias a la humectación.
Otra alternativa es la nebulización, sin embargo, no se recomienda para todo el mundo, incluso, cuando solo se realice solo con solución fisiológica.
Lo mejor
El vapor solo sirve si las secreciones no son fluidas, pues esta tiene por objeto hidratar levemente el moco para hacer más sencillo el proceso de aspirar o de sonarse la nariz.
En este sentido, si los mocos ya son flojos, no cambiará nada, ni tampoco generará un perjuicio en caso de querer usarlo.
En cuanto al uso del nebulizador, este instrumento permite llevar partículas de medicina a la vía aérea para que actúe directamente en ese lugar, pero solo se debe utilizar con fármacos cuando así lo recomiende un médico.
Por tanto, cuando se emplea solo con solución fisiológica, ayuda a despejar las vías respiratorias, pero no cura el cuadro que causa la tos porque no lleva incluida la medicina.
Es decir, cuando la tos es a causa de un resfrío, las nebulizaciones no hacen daño, pero tampoco cambia la cantidad de días de tos ni de malestar.
En conclusión, tanto el vapor como las nebulizaciones son realmente efectivas para aliviar la tos, dependiendo del tipo, y siempre y cuando se utilicen en el momento oportuno.
Con información de Diario 2001
