Venus, el segundo planeta de nuestro sistema solar, posee un comportamiento extraño en el que las 24 horas del día transcurren más lento que los 225 días que tarda en dar la vuelta al sol.
Asimismo, Forma parte de los cuatro planetas terrestres interiores, y a menudo se le llama gemelo de la Tierra porque es similar en tamaño y densidad, aunque hay diferencias radicales entre estos.
Venus tiene una rotación muy lenta, tanto que un año dura menos que un día. Es decir, tarda más en girar sobre su propio eje que en orbitar alrededor del Sol.
Una investigación dice que se debe a su densa atmósfera de rápido movimiento, de hecho, si no sería por eso probablemente no rotaría.
¿Por qué ocurre ese fenómeno en el planeta?
“Pensamos en la atmósfera como una capa delgada y casi separada en la parte superior de un planeta que tiene una interacción mínima con el planeta sólido”, dijo en un comunicado Stephen Kane, astrofísico de la Universidad de California.
Del mismo modo, Venus es un planeta parcialmente bloqueado por las mareas. Tarda 243 días terrestres en girar una vez, pero su atmósfera hace circular el planeta cada cuatro días.
“Venus es nuestra oportunidad de corregir estos modelos, de modo que podamos comprender adecuadamente los entornos superficiales de los planetas alrededor de otras estrellas”, dijo Kane.
La lenta rotación y densa atmósfera tiene consecuencias dramáticas en el clima. Las temperaturas en la superficie de Venus se acercan a los 500 grados Celsius.
Con información de Diario 2001
