«Es impactante ver cuánto hielo desaparece cada año», afirma Michael Zemp, glaciólogo de la Universidad de Zúrich y director del Servicio Mundial de Control de Glaciares (WGMSEnlace externo).
El año pasado los glaciares del mundo perdieron 450.000 millones de toneladas de hielo, según estimaciones que ha publicado el WGMS con motivo del Día Mundial de los Glaciares.
Es menos que lo que se perdió en 2023, pero suficiente como para hacer de 2024 el cuarto peor año de deshielo glaciar desde 1975 y el tercer año consecutivo en el que todas las regiones del mundo han experimentado una pérdida neta de hielo glaciar. En los últimos 50 años, los glaciares han perdido tanto hielo como para cubrir toda Alemania con una capa de 25 metros de espesor, según Zemp.
El deshielo de los glaciares amenaza el suministro mundial de agua
Los glaciares proporcionan agua dulce a más de dos mil millones de personasEnlace externo. Conforman el paisaje y contribuyen a la identidad cultural de países montañosos, como Suiza o Bolivia. Representan, asimismo, una fuente inestimable de datos sobre la evolución del clima.
Su retroceso debido al calentamiento global amenaza el abastecimiento de agua de las comunidades situadas aguas abajo en Asia y América Latina, sobre todo y repercute de manera negativa en la agricultura y la generación de energía hidroeléctrica. El deshielo de los glaciares aumenta el riesgo de corrimientos de tierras e inundaciones y contribuye a que suba el nivel del mar.
El Día Mundial de los Glaciares una iniciativa de las Naciones Unidas para promover acciones concretas que frenen el deshielo es uno de los actos más destacados del Año Internacional de la Preservación de los GlaciaresEnlace externo y pretende concienciar en torno al papel fundamental de los glaciares.
Entre sus objetivos está ampliar los sistemas mundiales de control. Suiza, por su larga tradición de investigación glaciológica, es líder mundial en este campo. El control de los glaciares es esencial para gestionar los recursos hídricos y predecir el impacto de la subida del nivel del mar.
El hielo se derrite incluso en las zonas más frías del planeta
Los glaciares de todo el mundo excluidos los continentales de Groenlandia y la Antártida entre 2000 y 2023 han perdido más del 5 % de su masa, según un estudioEnlace externo coordinado por el WGMS y publicado en febrero. El deshielo ha provocado que el nivel del mar haya subido casi 2 centímetros.
Los más afectados han sido los glaciares de Suiza y los Alpes europeos, que desde el año 2000 han perdido el 39 % de su masa. También han sufrido grandes pérdidas los glaciares del Cáucaso, el norte de Asia y Estados Unidos. El deshielo tampoco ha perdonado a los glaciares de las regiones polares.
Hasta hace unos 15 años había zonas en Noruega y Nueva Zelanda, por ejemplo— donde la masa de hielo aumentaba, explica Isabelle Gärtner-Roer, del WGMS, en una entrevista a la revista italiana Materia RinnovabileEnlace externo. En los últimos entre cinco y diez años, sin embargo, no ha habido regiones con crecimiento glaciar.
«Al ritmo actual de deshielo, los “hielos eternos” de muchas regiones no sobrevivirán al siglo XXI», predice Michael Zemp.
Con información de SWI