Humberto Figuera, presidente ejecutivo de la Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV), se pronunció este viernes sobre la medida anunciada por Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC), de implementar un pase viajero de bioseguridad que, deberán presentar los pasajeros antes de ingresar a Venezuela.
El pase que regirá a partir del primero de agosto es de carácter obligatorio, y será gestionado a través de un sistema llamado “Biochek”, para validar el esquema de vacunación contra el COVID-19 y/o la prueba PCR correspondiente, en caso de que el pasajero no esté inmunizado.
Al respecto, Figuera señaló que están tratando de estudiar el mecanismo y aspiran reunirse con todo el sector aeronáutico para discutir al respecto. Sin embargo, ve la decisión “como un obstáculo más” que atenta contra las recomendaciones de organismos internacionales de facilitar los tramites al pasajero.
“El mundo se está abriendo para convivir con el COVID, pero esta medida es un obstáculo más”, afirmó.
Destacó que Venezuela es el primer país en implementar un mecanismo como el Biochek y que, «el Inac se está convirtiendo en la autoridad que puede denegar el acceso de las personas a Venezuela», al solicitar el pase de viajero.
«¿Qué va a pasar que cuando un pasajero quiera venir y el sistema este caído?. Si una empresa petrolera tiene una emergencia y debe traer un técnico y no puede completar el tramite por plataforma ¿cómo hace?», cuestionó el representante de ALAV.
