||Agencias Nacionales
El fiscal general, Tarek William Saab, insistió ayer en que la muerte del exministro Raúl Isaías Baduel, fue por un paro respiratorio consecuencia de la COVID-19 y acusó a sus familiares de mentir, al negar la tesis del funcionario.
“Luego de conocerse el lamentable suceso, un fiscal nuestro con competencia plena que labora en tema de derechos humanos estuvo presente, junto con autoridades de Senamecf, realizando la autopsia”, manifestó. Reiteró que el militar falleció de una crisis hipotensa, “tuvo una crisis respiratoria que le dio como consecuencia final producto del avance del mortal virus que tenía, y con ello el paro respiratorio”. Saab aseguró que se comunicó con la esposa de Baduel cuando estaba siendo tratado por un médico y que le remitió fotos sobre su estado físico y también la valoración médica.
NO FUE COVID
Por su parte, la hija del general, Andreina Baduel, acusó al Gobierno venezolano de asesinar a su padre mientras se encontraba en prisión. “El régimen asesinó a mi amado y valiente papá Raúl Baduel. Recientemente tuvimos la fe de vida de él; es falso que tenía COVID-19. Él nos reiteró, una y otra vez, que no se iba a prestar para bufonadas de la tiranía. Su único propósito era dejarnos un legado de dignidad y fe”, escribió en Twitter.
Por su parte, el abogado de la familia Baduel, Omar Mora Tosta, declaró que la causa de la muerte debe investigarse. La familia solicita que les entreguen el cuerpo. “Que les entreguen el cuerpo del general y no ocurra, como en otros casos, que ellos disponen o lo creman”, indicó Mora Tosta.
