El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional de Guyana, Hugh Todd, sostuvo la semana pasada reuniones con los embajadores de China, Cuba y Rusia para informarles y discutir las últimas acciones emprendidas por el Gobierno de Venezuela contra Guyana por la disputa territorial sobre el Esequibo.
Todd se reunió el viernes con el embajador de China, Guo Haiyan; el día anterior (jueves) con el embajador de Cuba, Jorge Francisco Soberón Luis, y el miércoles, con el embajador de Rusia, Alexander Kurmaz.
Los diplomáticos fueron recibidos en la oficina de Todd, en la capital, Georgetown, reportó el diario Guyana Times.
Los tres países mantienen estrechas relaciones comerciales y de asistencia con Venezuela. Según informaron medios locales, el ministro de Exteriores guyanés manifestó a cada uno el compromiso de Guyana de resolver de manera pacífica el caso que se dirime en la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Venezuela ha levantado una campaña que reclama a Guyana por el territorio Esequibo, tras las negociaciones de ese país con trasnacionales para la explotación de hidrocarburos. Guyana considera la disputa resuelta con el Laudo Arbitral de París en 1899 y confía en que el caso en la CIJ reafirme la decisión.
Las últimas acciones del Gobierno de Venezuela, que ha convocado para el 3 de diciembre un referendo consultivo sobre la soberanía territorial del Esequibo ha ocupado titulares en la prensa local y provocado reacciones en el Gobierno de Guyana, que encabeza el presidente Mohamed Irfaan Ali, quien se reunió el martes con el líder de la oposición, Aubrey Norton.
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En una demostración de unidad, ambos emitieron una declaración conjunta en la que tildan de “reclamo espurio” las acciones de Venezuela y declaran la integridad y soberanía de Guyana un asunto de “suma importancia”.
Los dos líderes condenaron lo que consideran “la flagrante violación del estado de derecho por parte de Venezuela” y acordaron que “no se deben escatimar esfuerzos para resistir los persistentes esfuerzos de ese país por socavar la soberanía y la integridad territorial de Guyana”.
También, el Parlamento de Guyana (la Asamblea Nacional) celebrará el viernes, 3 de noviembre, una sesión extraordinaria en la que considerará una moción especial sobre la disputa fronteriza entre Guyana y Venezuela.
Las tensiones aumentaron después del anuncio del referéndum consultivo con cinco preguntas a los venezolanos. La Asamblea Nacional de Guyana ha estado en su receso anual desde el 10 de agosto de 2023.
La Comunidad del Caribe (Caricom) que agrupa a 15 países caribeños y de la que Venezuela es observador afirmó el 25 de octubre en una declaración que el referéndum propuesto por Venezuela en diciembre “no tiene validez, relevancia o prestigio en el Derecho internacional en relación con esta controversia; el referéndum es una construcción puramente interna, pero es probable que su efecto sumario socave la paz, la tranquilidad, la seguridad y más en nuestra región”.
En la nota publicada en el sitio oficial del grupo, que tiene sede en Georgetown, se recuerda que: “el derecho internacional prohíbe estrictamente que el Gobierno de un Estado se apodere, anexione o incorpore unilateralmente el territorio de otro Estado”.
Caricom también espera que los planes de Venezuela no incluyan el uso de la fuerza o acciones militares.
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El comunicado de Caricom provocó la reacción de la Cancillería venezolana, que hizo circular una comunicación en la que se afirma que Venezuela “toma nota” de la posición del grupo y recordó que “en la declaración de independencia de Guyana, Caracas indicó que su reconocimiento a la nueva nación se circunscribe al territorio ubicado en la margen derecha del río Esequibo”.
Venezuela posee las costas más extensas sobre el mar Caribe y también es el país con mayor territorio marítimo. Además, mantiene relaciones de cooperación con la región a través de Petrocaribe, una alianza entre algunos países del Caribe con Venezuela, para que compren el petróleo venezolano en condiciones de pago preferencial.
Caricom fue un grupo activo pidiendo el cese de las sanciones comerciales impuestas por Estados Unidos a Venezuela.
“Pese a que los límites territoriales de Guyana han quedado desde entonces bien establecidos, el Gobierno de Guyana ha pretendido apoderarse de un territorio sobre el cual no posee títulos, ni tampoco puede mostrar fuentes jurídicas que sustenten sus pretensiones, por lo cual ha estado disponiendo unilateralmente de este territorio y haciendo un uso abusivo”, reza la nota de la Cancillería venezolana.
Las tensiones también han ocupado titulares en la prensa local, con decenas de notas informativas, editoriales y artículos de opinión. Las acciones de Venezuela son vistas en el país vecino como una agresión o amenaza, o también como una maniobra política con más repercusiones dentro de Venezuela que afuera.
Pero hay también voces que alertan de esfuerzos para entablar un conflicto en la región que podría dañar las relaciones entre los países.
“La quinta y última pregunta del Referéndum venezolano previsto para el 3 de diciembre de 2023 está más que cargada, es explosiva. Representa una amenaza muy seria, un peligro profundo y acechante para toda Guyana”, dice el editorial de Kaieteur News, que agrega sobre el referendo consultivo promovido por el gobierno de Nicolás Maduro:
“Ofrecer la ciudadanía a los habitantes del Esequibo es irresponsable y peligroso… es una intrusión y una violación de los derechos de Guyana como nación soberana. Una abominación calculada que transgrede todas las normas de conducta internacional entre las naciones y reduce las normas vigentes a la ruina. Se trata de dar vueltas a lo que la historia ha establecido desde 1899, y en este referéndum y sus insidiosos cebos reside un acontecimiento verdaderamente desagradable que tiene el potencial de infligir algún daño grave y duradero a las relaciones Guyana-Venezuela”.
Con información de El Pitazo
