Los tobillos hinchados no es un tema solo de las embarazadas, o que afecta a las personas en los meses más calurosos; debes tener presente que detrás de ello puede haber un problema de salud.
Sin embrago, no es para preocuparse, sino ocuparse, pues afortunadamente este problema tiene solución.
Tobillos hinchados
La hinchazón de las piernas puede ser un signo de insuficiencia cardiaca, insuficiencia renal o insuficiencia hepática.
Expertos señalan que en estas afecciones hay demasiado líquido en el cuerpo y se acumula en las piernas; cabe acotar que algunos medicamentos también pueden hacer que las piernas se hinchen.
En cuanto a las causas más frecuentes que producen edemas en una sola pierna son: los secundarios a un traumatismo de dicho miembro. Los secundarios a infecciones de esa pierna. Los secundarios a problemas venosos, como la existencia de varices internas o trombosis en las venas de la pierna.
La hinchazón de tobillos es conocida como edema periférico y es causada por la acumulación de líquido en esta parte del cuerpo. Esta hinchazón es común y generalmente no es motivo de preocupación, sobre todo si hemos estado de pie durante mucho rato o si hemos caminado mucho.
No obstante, si los tobillos permanecen durante mucho tiempo hinchados y están acompañados de otros síntomas, puede ser señal de un problema grave de salud.
¿Por qué se hinchan los tobillos?
Los tobillos hinchados son más frecuentes en verano por las temperaturas ambientales altas y se debe a la retención de líquidos y a una mala circulación. Si este fuera el caso, se deben efectuar cambios en los hábitos de vida para solucionarlo. Sin embargo, no está de más consultar al médico por si puede ser una señal temprana de insuficiencia venosa, por ejemplo.
La mayoría de mujeres embarazadas sufren este problema, sobre todo, durante el último trimestre del embarazo, pero también puede ocurrir en otros momentos.
Causas
– Retención de líquidos.
– Exceso de peso.
– Dieta poco equilibrada.
– Insuficiencia venosa.
– Sedentarismo.
– Insuficiencia cardiaca, hepática o renal.
– Linfedema: aparición de edema debido a una obstrucción de los canales linfáticos.
– Infecciones.
– Lesión.
– Edad avanzada.
– Tabaquismo.
– Cambios hormonales durante el ciclo menstrual o la menopausia.
– Consumo de anticonceptivos o estrógenos y de otros medicamentos.
Herencia
Algunos expertos señalan que los tobillos hinchados puede ser un problema hereditario; es decir, las personas con padres que sufren hinchazón de tobillo tienen más probabilidades de desarrollar este problema por predisposición genética debido a una insuficiencia venosa.
¿Cómo evitar los tobillos hinchados?
Para evitar la aparición de la hinchazón de tobillos se deben adoptar los siguientes hábitos:
– Practicar deporte, pues el ejercicio mejora la circulación y evita la retención de líquidos.
– Perder peso.
– Mantener una dieta sana y equilibrada.
– Abandonar hábitos perjudiciales como el tabaco y el alcohol, y reducir los niveles de estrés.
– Mejorar el retorno venoso, para ello se sugiere evitar el uso de prendas excesivamente ajustadas, no cruzar las piernas, sentarse con las piernas elevadas, realizarse masajes en sentido ascendente, tomar baños de agua con sal y aplicar chorros de agua fría.
– Usar medias de compresión.
– Realizar baños de agua tibia con vinagre y sal.
Con información de 2001